Cruz Azul debe tener cuidado con los ridículos, porque esta vez se mandó otro. Ni con 14 minutos de agregado le pudo ganar a Querétaro, que se quedó con diez hombres en el Estadio Olímpico Universitario, al terminar 2-2 en un partido en el que Kevin Mier falló terriblemente y Luka Romero se fue expulsado.

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Bien dicen que los dichos populares son sabiduría ancestral: y en esta ocasión aplicó aquel sobre que el enemigo más grande es uno mismo. Y así le sucedió a Cruz Azul en este partido, uno de los que menos se pensaba que se le podía complicar de toda la fase regular.

Por la inercia positiva de La Máquina, por llevar siete victorias consecutivas, y porque el rival, en este caso Querétaro, es de lo peor del futbol mexicano desde hace varios años.

Sin embargo, se sabe que en el futbol las historias, por más que parezca que ya están escritas antes de que ruede la pelota, pueden cambiar por diversos factores.

Y en esta ocasión fue por Kevin Mier. No es la primera vez que le sucede al arquero colombiano de Cruz Azul que sus errores le han costado varios goles a La Máquina y aunque en este Apertura 2025 había estado bien, en este cotejo se mandó uno de esos groseros errores que en su carrera ya son habituales.

Porque una vez más quiso jugar muy adelantado de su portería, entre que tiene esa maña y entre que confiaba que a su equipo no le quitaran la pelota pasando el medio campo.

Termina el encuentro.

Dividimos puntos en el Olímpico Universitario. pic.twitter.com/s6kIcg5LKX

— CRUZ AZUL (@CruzAzul) September 25, 2025

El arquero colombiano hizo mucha confianza y el uruguayo Santiago Homenchenko, quien ya había metido un gol antes al 19′, robó el esférico al 34′ y desde donde estaba, a más de 50 metros de la portería, se comió vivo a Kevin Mier.

El charrúa, con gran visión de campo, observó que el guardameta estaba demasiado adelantado, por lo que metió un bombazo larguísimo, que obligó al portero a correr hacia atrás.

El tiro fue tan largo, que Kevin tuvo mucha distancia por recorrer y con falta de pericia y mecánica corporal, no atinó a rechazar bien la pelota, si bien la alcanzó a manotear. El esférico se metió para el sorpresivo 1-2 de Querétaro en Ciudad Universitaria y la afición se le volteó a Mier.

Porque no es la primera ocasión que le sucede una situación así; basta recordar la semifinal ante América en el Apertura 2024, cuando Richard Sánchez lo clareó y le metió un gol muy similar.

Lo que parecía un partido que iba a ser de mero trámite para los celestes, de pronto se puso tan negro como la noche fue cayendo en el Olímpico y La Máquina batalló muchísimo para encontrar los caminos.

Mismos que debieron ser muy sencillos, porque ni 15 minutos habían pasado del primer tiempo, cuando José Paradela con un disparo desde la media luna del área, había adelantado a Cruz Azul con un disparo raso.

Pero la ventaja le duró muy poco, ya que antes de su golazo de larguísima distancia, el mismo Homenchenko había empatado 1-1 al 19′, luego de mal rechace de la zaga cementera tras un tiro de esquina desde la punta izquierda.

Tras irse al mediotiempo con desventaja, el técnico cementero, Nicolás Larcamón, cambió su dibujo táctico y decidió poner doble nueve adelante, con el ingreso de Ángel Sepúlveda, más la presencia de Gabriel Toro Fernández quien inició de titular.

Querétaro se sintió extraño en un escenario que ni en el más optimista de sus sueños, imaginó con tener y estar en ventaja de visita ante el líder Cruz Azul.

Quizá por ello fue que ya iniciado el segundo tiempo, se autosaboteó y el ecuatoriano Jhohan Julio se hizo expulsar por una grosera falta por detrás que lesionó a Willer Ditta y lo obligó a salir del campo, aunque en primera instancia, la silbante Karen Hernández solo había calificado de amarilla y la tuvieron que apoyar desde el VAR.

Ya con un hombre menos, con más de 20 minutos por delante en el cotejo, Querétaro tuvo que soportar a como diera lugar, el maremoto que se convirtió Cruz Azul, que obviamente iba a intentar evitar el ridículo de perder contra Gallos Blancos; además, para no dejar vacante el liderato y cortar una racha de siete partidos seguidos con triunfo.

Pero otra vez, al igual que con Mier, el enemigo en este cotejo estuvo dentro del mismo equipo cementero, porque pocos minutos después de la expulsión para Querétaro, Luka Romero quiso nivelar las acciones y le metió tremenda plancha a Francisco Venegas. A la jueza de nuevo le hablaron del VAR y sacó la segunda tarjeta roja en este partido al 75′.

Aún con la expulsión y que Cruz Azul fue su peor enemigo en este cotejo, la obligación seguía siendo toda del conjunto local, de al menos rescatar el empate. Y así sucedió.

Una vez más, como fue en anteriores cotejos, el salvador fue el Toro Fernández, quien remató de primera intención una pelota dentro del área, para vencer al arquero Guillermo Allison y poner el 2-2 al 83′.

Todavía había tiempo regular para que Cruz Azul consiguiera su octava victoria al hilo. Y por si fuera poco, la silbante Karen Hernández agregó 14 minutos, por las dos revisiones de las rojas en el VAR y el tiempo de atención a los jugadores.

Pero nada más sucedió y La Máquina dio una muy mala presentación ante su gente, en uno de los partidos que en teoría eran de los más fáciles del semestre.

⚽💥 ¡EMPATE! ‘Toro’ Fernández iguala el marcador para Cruz Azul frente a Querétaro 💙 #LigaMX pic.twitter.com/iHl9lwIRSH

— TUDN MEX (@TUDNMEX) September 25, 2025