El césped de la Catedral del Tenis ha sido cortado al ras y ese peculiar aroma a fresas con crema ya ronda por las tribunas de un torneo que evoca la elegancia y estilo de aquel 9 de julio de 1877, cuando se jugó por vez primera. Wimbledon suspira por ver por última vez la mejor versión de Novak Djokovic, mientras que al mismo tiempo, añora una Final entre las dos nuevas caras del tenis, Jannik Sinner y Carlos Alcaraz, tal como apenas ocurrió en Roland Garros.

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El All England Club está listo para atestiguar una histórica edición de Wimbledon. El tercer Grand Slam del año contará con un cuadro plagado de duelos de alto voltaje desde la primera ronda. Djokovic, en busca de su título major número 25 y Alcaraz, defensor del título y aspirante al triplete Roland Garros-Queen’s-Wimbledon —que no ocurre desde 2008— son los grandes protagonistas junto al número 1 del mundo, Sinner.

El serbio, cabeza de serie número 6, podría toparse con Sinner en Semifinales. Precisamente el de San Cándido, Italia, fue quien derrotó al de Belgrado, Serbia, en esa misma fase del Abierto de Francia hace unas semanas. Sin embargo, a pesar de sus recientes caídas ante el italiano, Nole mantiene su esplendorosa aura en la hierba, donde busca su octavo título en Wimbledon para igualar a Roger Federer como máximos campeones ahí.

Con 38 años que cada vez pesan más, y tras una cirugía de rodilla el año pasado, el balcánico sabe que su experiencia y mentalidad son armas clave para la batalla contra una nueva generación que ya acapara los grandes escenarios del deporte blanco.

El español, número 2 del mundo, llega a Wimbledon tras conquistar Roland Garros y Queen’s, y cuenta con la suerte de haber sido sorteado en un lado del cuadro que parece mucho más accesible a priori. Aunque tiene rivales peligrosos como Jakub Menšík o Ugo Humbert, sus posibles enfrentamientos contra Stefanos Tsitsipas, Felix Auger-Aliassime y Andrey Rublev ya no lucen tan amenazantes como en años anteriores debido al bajón de juego de esa camada.

Alcaraz debutará ante el veterano Fabio Fognini, y de avanzar, enfrentaría al ganador del duelo entre Oliver Tarvet y Leandro Riedi. Su último obstáculo antes de Semifinales podría ser Alexander Bublik, reciente campeón en Halle y verdugo de Jack Draper en Roland Garros.

Es así que la joya de la corona del tenis mundial brillará durante las próximas dos semanas a partir de este lunes 30 de junio y hasta el 13 de julio. Como el torneo de tenis más antiguo del mundo, The Championships representa la fusión de tradición y prestigio dentro del All-England Club en el frondoso suburbio londinense de Wimbledon.

Es el tercer Grand Slam de la temporada y el único que se juega sobre hierba, una superficie que provoca un rebote tentadoramente bajo a velocidades asombrosas. El hombre a vencer en el cuadro ATP es el murciano y doble campeón defensor con una racha de 18 victorias, la mejor de su carrera.

Por si fuera poco, el número 2 del mundo está invicto en hierba desde junio de 2024, por lo que será un animal salvaje dispuesto a todo por conservar su imbatibilidad y muy difícil de domar por el resto de los competidores. A menos que se trate de su antagonista generacional italiano o el jugador más ganador de todos los tiempos.