Martín Avilés / Ovaciones
Foto: Mexsport
Los Pumas terminaron su partido de la Jornada 11 del Clausura 2024 con el auxiliar José María Bazán como el encargado del equipo. La expulsión de Gustavo Lema dejó a los universitarios sin timonel, en un juego ante Xolos bastante trastabillado.
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El argentino de 52 años, fue el encargado de dirigir a los auriazules en los 30 minutos finales del empate contra Tijuana en el Olímpico Universitario, partido que consideró como inusual por la forma en que considera fueron afectados por las decisiones del árbitro.
“Fue un partido muy atípico. El equipo se vio bien, con un rendimiento táctico como o habíamos planeado, pasa esto, nos molestó mucho, en lo emocional estábamos excitados, es normal, es futbol, no podemos hablar mucho de los árbitros, se vieron los penaltis. Me parece que cuando hay un choque de cabezas, un debutante, un chico de 20 años, puede ser peligroso, si llega a pasar, es brava, es un choque de cabezas, los médicos entraron bien, lo atendieron, estaba mareado, los doctores estaban adentro y siguieron la jugada, si pasa algo, es muy duro”, comentó el asistente de los Pumas en rueda de prensa.
Sobre las distracciones que sufrieron en el costado defensivo y que les impidió sumar de tres, indicó: “Son decisiones que se hicieron antes del torneo, tres goles en el segundo contra Chivas, luego contra Monterrey, hay detalles que hay que mejorar. Pienso que debe de haber un antes y un después de este partido, tres goles de penalti, es difícil analizar lo que pasó. Seguiremos trabajando con los jugadores”.
“Tenemos que seguir mejorando, pienso que estamos por el camino correcto, la entrega está. Nos faltan detalles, mantener el performance, más de los 90 minutos que juguemos, vamos por buen camino, quiero repetir que hubo una crisis donde se recuperaron, los muchachos se entregaron, pueden soñar, con esa hombría, con esa idea, podemos soñar en grande”, añadió.
Más allá de estar lejos de los primeros lugares en el Clausura 2024, en el cuerpo técnico de los Pumas existe optimismo por llegar a la liguilla cerca de su mejor nivel. “Es para soñar, el plantel se hace grande, de entrega total, cuando un plantel se hace un equipo, el Puma va a ser peligroso”, finalizó Bazán.