MARTÍN AVILÉS

Foto: Reuters

“En serio, muchachos, ¿quién tiene mis audífonos?”, preguntó Markelle Fultz a sus compañeros Admiral Schofield y Jalen Suggs, ambos con máscaras de lucha libre mexicana en el rostro. Las carcajadas no se hicieron esperar en una atmósfera tan liviana que asemejaba a la de un equipo colegial. Orlando Magic tiene una de las plantillas más jóvenes de la NBA y en México enfrentará al también jovial equipo de Atlanta Hawks, en un duelo que dibuja el nuevo y rejuvenecido rostro de la liga.

Todos los los ojos estarán sobre las dos figuras que presumen respectivamente, siendo Trae Young la estrella de los Hawks con 25 años y Paolo Banchero el futuro por el que apostó el Magic a pesar de ser un chico de apenas 20 años de edad. El partido número 13 en la historia de la NBA disputado en territorio nacional, será la primera visita de Atlanta al país azteca, mientras que para Orlando se trata de su cuarto encuentro aquí.

La Arena de la Ciudad de México reunirá a dos de los clubes más jóvenes de la liga, toda vez que el Magic es el quinto más joven en toda la NBA con un promedio de 24.3 años de edad en su plantilla, mientras que los Hawks son el lugar número 15 de ese rubro con 26.1 años de edad en promedio entre sus jugadores.

“Hay mucho talento, el nivel de talento es diferente al de antes. Hay muchos chicos talentosos en esta nueva generación”, dijo el veterano Dejounte Murray sobre las nuevas camadas que poco a apoco se apoderan de la liga, como ocurrió con Young en primera instancia, y más recientemente con Paolo.

Orlando apostó por el egresado de la universidad de Duke al elegirlo como la primera selección global del NBA Draft 2022. Banchero en teoría serviría como imán para atraer a más aficionados en Europa debido a sus raíces itálicas, sin embargo, levantó la polémica al jugar el pasado Mundial FIBA 2023 con Estados Unidos pese a que se decía orgullosamente italiano.

Del otro lado, Trae Young sí que ha entendido la dimensión global del juego. El base nacido en Lubbock, Texas, creció rodeado de mexicanos, dada la cercanía de dicha ciudad con la frontera norte del país azteca. De hecho, Young creció siendo admirador del exjugador de NBA, Eduardo Nájera.

“Nací en Texas, estuve rodeado de muchos latinos y gente mexicana. Era un gran fan de Eduardo Nájera. Él jugó contra mi papá y lo pude conocer un par de veces. Mientras crecí, él estaba en la liga (NBA) y pude verlo”, comentó orgulloso el estelar del equipo de Georgia.

Este rejuvenecido duelo enmarcará la trigésimo segunda vez en que la NBA trae un juego a un país que, de acuerdo con las cifras proporcionadas por la propia liga, tiene alrededor de 30 millones de fanáticos del baloncesto. Un suculento mercado para explotar cuanto más se pueda y llevar a esta liga a un nivel cada vez más elevado entre las preferencias del público a nivel global.

Es por ello que la Ciudad de México es una potencial sede para un equipo de expansión en la NBA hacia el futuro, un tema que se toca cada vez que la liga visita el país. De hecho, actualmente ya cuenta con un equipo de la G-League, los Capitanes CDMX, equipo que corrió con el infortunio de anunciar su llegada a la liga de desarrollo en plena pandemia.

“No sé si expandirá eventualmente en algún momento pero nunca sabes dónde terminarás jugando pero no me importaría venir una vez al año aquí o lo que sea, es una gran Arena y espero a jugar el juego pero sé que será emocionante mañana”, dijo Trae Young al respecto.

El récord de puntos en un partido en México es de 41 unidades, cifra que estableció el esloveno Luka Doncic, de los Dallas Mavericks en el ya lejano 2019. Cuatro años después, el rival generacional del exjugador del Real Madrid estará en la misma duela con la única idea de ganar, aunque seguramente le pasará por la cabeza el enterrar la marca de su antagonista.

“No me comparo con nadie. Sólo pienso en salir a la cancha, jugar duro, dar espectáculo y ganar”, aseguró Young, quien en el Draft de 2018, fue parte de un trueque con Luka, quien fue seleccionado en la tercera posición por los Hawks, pero intercambiado a Dallas por Trae.

La altura de la Ciudad de México será como siempre un tema caliente para la NBA en sus visitas aquí. Rodeada de montañas, la capital del país se encuentra a de 2 mil 240 metros sobre el nivel del mar. Un punto en contra en la puja de la ciudad por hacerse de una franquicia de la liga.

“Ayudó un poco, pero los primeros pasos hacia arriba y hacia abajo definitivamente lo sentiste”, dijo el alemán Franz Wagner sobre esta situación. “Pero Atlanta también tendrá el mismo problema, por lo que debería ser divertido”.