Existen en México 14 millones de diabéticos

14, noviembre 2022

AIDA RAMÍREZ

Foto: Cuartoscuro

Personas de cualquier edad, pero principalmente, las mayores de 30 años “deben cuestionarse cómo se quieren ver y vivir dentro unos años, la calidad de vida que quieren para más adelante, porque la diabetes es cada vez más común entre los mexicanos y ahora ya, entre los menores de edad.

Se estima que en el país existen 542 mil niñas y niños que viven con diabetes tipo 1 y casi 78 mil infantes la desarrollan cada año.

En el marco del Día Mundial de la Diabetes, hoy 14 de noviembre, Cristina Flores Velázquez, médico familiar, en entrevista con Ovaciones indica que se ha culpado a la comida “chatarra” de causar a los pequeños esta enfermedad, también es cierto que el sedentarismo, falta de actividad física, exceso de tiempo frente a videojuegos o el televisor, ha provocado que una gran población de infantes presenten diabetes tipo 2 (DM2).

Aunque la denominada pandemia del siglo XX no ha logrado ser domada en México por el gobierno federal, mantiene una campaña dirigida a la población para que coma mejor, se active, se monitoree para prevenir cualquier complicación.

Pero durante el autoconfinamiento por el Covid-19 permitió que millones de personas no se contagiaran, y generó una crisis económica, un retraso educativo, el sedentarismo en millones de personas que detonó que un mayor número padezcan de la otra pandemia.

Mientras que en 2016 la incidencia de DM2 fue de 2.05 casos por cada 100 mil habitantes, en 2020 la cifra ascendió a 2.9 casos; y la International Diabetes Federation (IDF), estima que en México, 14 millones de adultos viven con diabetes, un aumento del 10 por ciento en los últimos dos años.

De ahí que, al regresar a la nueva normalidad desde finales de 2021, médicos de primer contacto del sector salud público y privado se percataron que entre las personas que estaban “debutando” con DM2, se encontraban menores de edad, y que las personas mayores llegaban con un descontrol de la enfermedad, señaló Flores Velázquez.

En 2021, Ana Lilia Rodríguez Ventura, académica de la Facultad de Medicina de la UNAM, en el programa Más Salud, señaló que la DM2 prevalece en personas mayores de 40 años, pero “lo más alarmante es que niños de entre 8 a 10 años, así como adolescentes, ya la padecen”.

Hace 30 años, de cada 100 pequeños con diabetes únicamente 2.0 por ciento correspondía a la tipo 2, y ahora ha aumentado hasta 22 veces más, y eso es grave porque esta modalidad sí se puede prevenir, subrayó.

Así, médicos señalan la necesidad de que las personas se hagan estudios de valoración que les permita saber si efectivamente ya son diabéticos o están a un paso de serlo, pues muchos van a consulta con algunos síntomas o con la enfermedad avanzada.

Flores Velázquez comenta que en algunos sistemas de salud del país, se trata de reeducar a la gente, “que tomen conciencia del padecimiento con el que vivirán el resto de su vida”.

Se les dice cómo conocer y reconocer el padecimiento, cómo controlar su enfermedad por medio de una alimentación sana y, en su caso, con medicamentos, actividad física y una situación emocional y familiar controlada para no padecer las implicaciones de la misma, como amputaciones, insuficiencia renal, falta de visión, hipertensión, entre otras.

Al coordinar el programa, explica que un equipo de especialistas valora a cada persona, se le hacen estudios de laboratorio y se le receta medicamentos al paciente; hay un profesional de la nutrición; una enfermera especializada y un odontólogo. Todo para llegar a un control metabólico que permita tener glucosa, colesterol, triglicéridos y presión arterial, así como el funcionamiento de hígado y riñones, en óptimas condiciones.

La médico familiar indica que en estos momentos evalúa a unas 320 personas, en donde alrededor de 100 trabajan por alcanzar ese control metabólico, “¡¿qué nos esperamos de los que no tienen esa educación ni el acceso al tratamiento?!, porque el buen tratamiento no es barato”, toda vez que puede costar mil 400 pesos.

Por ello, “son privilegiados quienes tienen seguridad social, a quienes se les da el medicamento, pero consideró que tienen que poner de su parte para las metas y, con ello, alargar su vida pero con calidad”.