JOSÉ ANDRÉS DÍAZ

Foto: Reuters

La Salernitana está condenada al descenso esta temporada en Italia, y parece ser que no hay poder humano que lo pueda evitar. Ni siquiera el arquero mexicano, Guillermo Ochoa.

Y es que con todo y críticas, cuestionamientos, juicios y demás en México, el guardameta de 38 años sigue teniendo grandísimas actuaciones en su equipo, ya que si bien cayó este sábado 0-2 ante el Campeón Napoli de local, evitó la goleada al conjunto granate.

Para darse una idea, antes del juego, el arquero de la Selección Mexicana fue reconocido como el mejor jugador de la Salernitana en el mes de octubre. El mejor jugador de este equipo es el portero. Eso habla muy bien del guardameta, pero muy mal del resto de sus compañeros, porque al recibir ese galardón, renoce la calidad del portero, pero también exhibe lo mala que es su defensa.

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Los goles del Napoli este sábado corrieron a cargo de Giacomo Raspadori a los 13 minutos, mientras que el segundo del Campeón italiano llegó hasta el 82′, por medio del macedonio Elif Elmas.

Entre los dos goles, es decir, prácticamente todo el juego, Ochoa ayudó varias veces a que la Salernitana no recibiera más anotaciones y así el encuentro terminara con marcador de escándalo.

La Salernitana es última de la Serie A con solo 4 puntos de 33 disputados y sin haber ganado un solo partido hasta el momento. Memo Ochoa destaca en su equipo, pero sus esfuerzos son inútiles porque el resto de sus compañeros no le ayuda a sacar del bache al club, que justo si este año está en la Primera División Italiana, es gracias a que el arquero mexicano llegó a salvarlos la temporada pasada.