AIDA RAMÍREZ

Foto: Cuartoscuro

El Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) aumentó, en julio pasado, 0.48 por ciento respecto al mes anterior, por lo que con este resultado, la inflación general anual se ubicó en 4.79 por ciento, desde el 5.06% que se observó en junio anterior.

De esta forma, la inflación sigue desacelerándose y ya suma seis meses de bajas consecutivas y mantiene su tendencia hacia la meta del Banco de México (Banxico) de 3.0% +/-1 punto porcentual.

Con datos presentados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el índice de precios subyacente, que determina la trayectoria de la inflación general en el mediano y largo plazo y que elimina los precios más volátiles, incrementó 0.39 por ciento mensual y se ubicó en 6.64 por ciento anual, cifra ligeramente menor al 6.89 del sexto mes del año.

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En el mes que se informa, el séptimo de esta anualidad, el índice de precios no subyacente, que incluye los productos genéricos cuyos precios son más volátiles, tuvo una variación de 0.77 por ciento a tasa mensual y una contracción de 0.67 por ciento a tasa anual.

De acuerdo con el Instituto, al interior del índice subyacente, los precios de las mercancías subieron 0.31 por ciento y los de servicios, 0.49 por ciento.
Mientras que dentro del índice no subyacente, los precios de los productos agropecuarios crecieron 1.90 por ciento, mientras que los de energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno bajaron 0.23 por ciento.

Según la tabla del INEGI, los productos que reportaron una mayor disminución de precio fueron el gas doméstico, huevo, uva, papa, jitomate, pollo, material escolar, neumáticos, aceites y grasas vegetales comestibles y salchichas.

Y los que mostraron aumentos de precio por inflación durante la quincena fueron el aguacate, cebolla, transporte aéreo, plátanos, naranja, vivienda propia, chayote, loncherías, fondas y taquerías, servicios turísticos en paquete y la lechuga.

Sobre este tenor, Gabriela Siller, directora de Análisis Económico en Grupo Financiero BASE, indicó que los resultados para el mes de julio, en donde la tasa mensual se ubicó en 0.48%, está por debajo de la inflación promedio para el mismo mes de 2021 y 2022, “mostrando que las presiones inflacionarias observadas después de la pandemia por Covid-19 continúan disminuyendo”.

Asimismo, sobre la inflación subyacente, que determina la trayectoria de la inflación general en el mediano y largo plazo, se ubicó en 6.64% anual, disminuyendo por sexto mes consecutivo y ubicándose en su menor nivel desde febrero del 2022.

A tasa mensual, Siller Pagaza comentó que la subyacente se ubicó en 0.39%, que históricamente sigue siendo un nivel elevado para julio, pues en los 10 años previos la inflación promedio en el mes fue de 0.29 por ciento; pero se ubica por debajo de la inflación observada en 2021 de 0.48% mensual y de 2022 de 0.62% mensual, lo que “evidencia de que las presiones están disminuyendo gradualmente”.

Con estos resultados, confía en que el banco de México mantenga sin cambios la tasa de interés en su anuncio de política monetaria este jueves.