La Guardia Nacional a la SDN

18, septiembre 2022

JAVIER OLIVA POSADA

Poder Nacional

Ya publicada la ley correspondiente en el Diario Oficial de la Federación, el pasado viernes 9, luego de un intenso debate en ambas Cámaras del Congreso, se formalizó lo que en los hechos fue desde el principio, cuando hizo su pase de entrada de revista la Guardia Nacional, el 30 de junio de 2019, en una ceremonia en el Campo Marte. El soporte institucional desde ese día, por parte de la Secretaría de la Defensa Nacional, ha resultado determinante para que a partir de entonces, se pueda al menos, contener las actividades de la delincuencia organizada.

Al referido debate parlamentario, se sumó la propuesta de una diputada del Partido Revolucionario Institucional, de modificar el artículo 5 transitorio, contenido en las adecuaciones a la Constitución para dar paso a la creación de la Guardia Nacional. Ya fue aprobada en la Cámara de Diputados y será el próximo martes 20, cuando se discuta en el Senado de la República.

La propuesta de ampliar hasta el 2028 la presencia extensa e intensa de las Fuerzas Armadas en tareas de apoyo a la Seguridad Pública, ha generado un intenso y encendido debate a propósito de lo que puede significar la medida.

No debe escapar al análisis, que el hecho de que el PRI y el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) y sus aliados parlamentarios hayan votado juntos la ampliación del período referido y que tiene que  ver con una compleja situación de política, electoral y hasta judicial.

Por una parte, la alianza Va por México, se encuentra “suspendida”, a decir de los dirigentes de los Partidos de la Revolución Democrática y Acción Nacional, debido a que lo que calificaron como una “traición” del dirigente nacional del PRI y de la propia bancada. Esto a su vez, propició una seria fractura con los Senadores de ese partido y de nueva cuenta, exigieron la renuncia del diputado Alejandro Moreno.

Otra de las consecuencias directas de la propuesta para la ampliación del pazo, serán procesadas por los comicios del siguiente año en los Estados de México y de Coahuila. Pues se había plantado la opción de que en ambas elecciones, por tratarse de dos entidades –por cierto las únicas dos, gobernadas por el PRI, tendrían ventaja  sus aspirantes contando con el apoyo de la Va por México. Por el momento, no hay condiciones para construir una candidatura común, luego de lo sucedido en San Lázaro.

En la ecuación política, los principales afectados fueron, por supuesto el PRI y la Alianza, que por cierto, Marko Cortés presidente del PAN, ya dio por terminada.

Por otra parte, debe ponderarse el notable aumento en la intensidad del debate en la opinión pública y en los medios digitales y convencionales de comunicación, respecto de nueva cuenta, el concepto de militarización.

Más aún, sobre un supuesto incremento en la fuerza política de los militares, sin que lo anterior pueda probarse en los hechos. De allí, que es sustancial considerar los escenarios que se forman para los próximos meses, en las relaciones civiles militares, a partir de dilatados prejuicios para tratar a las Fuerzas Armadas en su conjunto.

Hay que subrayarlo, que las acciones emprendidas por éstas, son por órdenes del Comandante Supremo y de ninguna forma, por iniciativa castrense. Y este es un argumento clave para analizar si hay o no militarización; es por cadena de mando, por instrucciones del Presidente López Obrador que cumplen dichas encomiendas.

Es decir, el sentido contrario respecto de una inexistente búsqueda de influencia y poder, a costa del estamento civil.  

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@JOPso