Manotazo al INE

3, noviembre 2022

PEDRO PEÑALOZA

La historia ocurre dos veces: la primera como una gran tragedia, la segunda como una miserable farsa.

Karl Marx

Como parte de la estrategia presidencial, de eliminación de órganos autónomos y permanencia de un solo partido en el poder, ha lanzado una ofensiva para desmantelar al Instituto Nacional Electoral. El objetivo es evidente, se trata de ponerlo al servicio del oficialismo. López Obrador y sus propagandistas han desarrollado una campaña que oculta lo principal y que se ha centrado en el volumen de recursos económicos que utiliza el INE, para denostarlo como una instancia que usa el dinero público de manera “dispendiosa”.

En realidad, más allá de esta neblina del morenismo, el núcleo de la propuesta es que el partido tenga la aplastante mayoría en el nuevo organismo electoral, bajo una fórmula en donde los consejeros serán propuestos por el poder ejecutivo, el legislativo y el judicial, para que sean elegidos en votación abierta. Igual suerte seguirán los miembros del Tribunal Electoral. No se requiere mucha imaginación para predecir el resultado, si nos atenemos a la hegemonía que ejerce el presidente en los otros dos poderes de la unión.

En efecto, es volver al pasado, en donde el organismo electoral era dirigido por personeros del gobierno y terminar con la principal riqueza del órgano electoral, es decir, su autonomía de los partidos y el gobierno. La preocupación del tabasqueño por garantizar el triunfo de su candidato en las próximas elecciones presidenciales es evidente y ésta es su principal propuesta para la edificación de un sistema que perpetúe al morenismo en el poder.

La iniciativa oficial dinamita los logros por los que luchamos por la democracia y contra la hegemonía del partido único, quien ejercía su poder desde la Comisión Federal Electoral, donde el presidente y árbitro era el Secretario de Gobernación. De pasar la iniciativa, tendremos una institución controlada por Morena. Así, un movimiento que llegó a la presidencia en 2018 para acabar con la “mafia del poder”, ahora busca instalar una mafia electoral al servicio del presidente. Es la esencia de un gobierno especialista en el transvestismo político, empeñado en sepultar sus promesas.

Se sabe que la fracciones parlamentarias opositoras están en contra de la iniciativa. La duda es si el PRI será doblado, junto con otros diputados. Ya algunos sectores sociales y religiosos se han manifestado en contra del atropello. Es imprescindible, otra vez, poner en movimiento a la audiencia social para detener la embestida de López Obrador y sus epígonos.

Aquí se juega mucho de la convivencia democrática en nuestro país y no únicamente del futuro inmediato.

@pedro_penaloz