AIDA RAMÍREZ

Foto: Cuartoscuro

La secretaria de Economía, Raquel Buenrostro no descarta que México pueda ser una potencia económica en los próximos 30 años si se aprovechan por completo las oportunidades del nearshoring.

En la presentación del proyecto Sur-Sureste con los mecanismos, bases de la licitación de los polos de desarrollo y los incentivos fiscales que tendrá el Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec (CIIT), reiteró que el país tiene una ventana de oportunidades única que no debe desaprovecharse.

Una de las oportunidades es la relocalización de las cadenas de proveeduría, por lo que se deben desarrollar las regiones económicas del país.

Así lo señaló al dar a conocer que iniciarán las licitaciones, seis de 10, para los polos de desarrollo del Corredor Interoceánico.
“Lo que buscamos es que lleguen inversiones que sean sostenibles, que sean oferta de puestos de trabajo dignos y bien remunerados. Estamos dando un banderazo para los próximos 30 años de

México, el país tiene todo el potencial para ser una gran potencia económica en los próximos 30 años”, afirmó. Señaló que el Corredor Interoceánico colocará al Istmo de Tehuantepec en una posición central del comercio global y que como nunca antes, el gobierno está invirtiendo en infraestructura bajo la premisa de cerrar brechas regionales.

Ante el presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Francisco Cervantes, así como presidentes de cámaras empresariales, directivos de empresas y potenciales inversionistas, explicó que las primeras bases de la licitación son para los polos que se ubican, del lado de Veracruz en Coatzacoalcos I (257 hectáreas), Coatzacoalcos II (131 ha), Texistepec (462 ha) y San Juan Evangelista (360 ha). Los polos ubicados en Oaxaca son Salina Cruz (82 ha) y San Blas Atempa (331 ha).

En cuanto a los incentivos fiscales, se anunció que el paquete está conformado por depreciación acelerada durante los primeros seis años, así como exención del IVA en transacciones al interior de los polos y entre estos durante los primeros cuatro años.

Asimismo, se aseguró la exención al 100 por ciento del Impuesto Sobre la Renta (ISR) durante los primeros tres años, con posibilidad de extenderse por tres años adicionales con una reducción de hasta el 90 por ciento, en función de variables como número de puestos de trabajo creados.

Buenrostro advirtió que, en una primera fase, a los inversionistas se les darán dos años para concretar las inversiones y si no, se retirará la concesión para volverlo a licitar, porque no quieren “especulación, sino desarrollo real para el sur-sureste del país”.