Morena en el Senado demandó la remoción de la panista Kenia López como presidenta de la Comisión de Derechos Humanos, bajo el argumento de que ostenta el cargo con fines políticos y omisiones en su gestión.

El grupo parlamentario mayoritario de la Cámara alta entregó a las presidencias de la Mesa Directiva y de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) una carta exponiendo los motivos para solicitar la remoción de López Rabadán a la presidencia de la comisión legislativa.

En la carta, de 4 cuartillas, firmada por los morenistas Nestora Salgado, María Celeste Sánchez, Martha Guerrero, Martha Lucía Micher, Antares Vázquez. Nancy Guadalupe Sánchez, Miguel Ángel Navarro y Gloria Sánchez, integrantes de la Comisión de Derechos Humanos, y avalada por la bancada de Morena, acusan a la panista de actuar en función de sus intereses políticos y fines del PAN.

La misiva fue leída por Antares Vázquez en la sesión de la Comisión de Derechos Humanos:

“Solicitamos su intervención, a fin de que López Rabadán sea removida de su cargo como presidenta de la Comisión de Derechos Humanos, a razón de haber fallado a su responsabilidad de actuar de manera imparcial en el ejercicio de sus funciones, emitir expresiones contrarias al respeto a los derechos humanos.

“Además, no garantizar que los trabajos de la Comisión se lleven conforme a las disposiciones que nos rigen, informamos también que hasta en tanto nuestra petición sea atendida, quienes suscribimos manifestamos nuestro rechazo a la titularidad de la senadora del PAN como presidenta”.

La panista Kenia López reviró a la demanda de los senadores de Morena, al señalar que no van a coincidir, porque tienen visiones distintas de la política, del país y de lo que hace el gobierno federal.

“No vamos a coincidir, pero por supuesto que tienen derecho a defender lo que sucede en el gobierno y yo a reclamar lo que sucede en el gobierno, si hay una decisión de este Senado, la sabremos.

“Yo solo quiero decir: No me van a callar, no me voy a detener en seguir defendiendo a millones de mexicanos. La verdad es que hay muchas cosas en este país, en términos de derechos humanos, lamentablemente están mal”, enfatizó.

En su oportunidad, Emilio Álvarez Icaza, senador sin partido, tuvo que mediar entre las morenistas y la panista, al mencionar que es claro que estamos en desacuerdo, veremos qué con la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) hay controversias judiciales, más adelante lo veremos.

Indicó que aunque se tengan absolutas diferencias en la valoración, actuación y la agenda nacional, “tendremos todos el derecho, mientras no nos faltemos al respeto, a decir lo que pensamos y aunque sea esto crítico y doloroso”.

“Yo pienso que la elección de la CNDH fue fraudulenta, retomemos el camino de esta comisión, mientras no haya otro acuerdo, eso obedece también a una pérdida de confianza, pues es así, la pérdida de confianza es mutua.

“Debo decir, con todo respeto, que a mi se me rompió la confianza en la mayoría con la elección de la titular de la CNDH y lo digo con el más grande respeto”, expuso.

En el escrito los morenistas reiteraron que Kenia López actúa con intereses políticos y un ejemplo fue la elección de la titular de la CNDH, Rosario Piedra Ibarra.

Afirman que la panista mantuvo una actitud contraria a los intereses de una comisión pluripartidista, pues a partir del dictamen todos los posicionamientos que realizó en su calidad de presidenta fueron hechos como integrante de un grupo parlamentario.

Indicaron que esa situación puso en tela de juicio la candidatura que la panista había validado y contribuyó a detonar la crisis violencia más grave que ha enfrentado esta Legislatura.

También, cuestionaron su actitud protagonista y descalificación hacia la titular de la CNDH, después de una reunión privada celebrada el 10 de septiembre pasado, donde tergiversó el sentido del encuentro y omitió mencionar las acciones, atención a víctimas, mejor uso presupuestal y retos por venir del organismo promotor de los derechos humanos.

Señalaron que en esa ocasión lejos de actuar con imparcialidad o de construir acuerdos, detonó una dinámica de hostilidades que pone en riesgo la relación del Senado y de la comisión que preside con la CNDH.

Aseveran que existen múltiples irregularidades en la gestión de Kenia López, como un proceso de dictaminación extremadamente lento, alcanzando incluso 19 meses para procesar un punto de acuerdo, iniciativa o minuta; además de que las reuniones no se realizan con la periodicidad mínima que mandata la normatividad del Senado.

En la reunión de la Comisión de Derechos Humanos, la mayoría de Morena desechó un punto de acuerdo promovido por Álvarez Icaza para citar a comparecer a Rosario Piedra Ibarra.