Peso pluma

5, mayo 2023

LUIS HUMBERTO FERNÁNDEZ

 

Hace unos días, el cantante Peso Pluma se convirtió en el primer mexicano en ser el más escuchado en el mundo en Spotify con su canción Ella Baila Sola, la cual acumuló más de 6 millones de reproducciones en tan solo unas semanas. No sólo eso, el cantante jalisciense de 23 años tiene seis canciones que figuran entre las cien más escuchadas en los Estados Unidos, superando a otros artistas como Miley Cyrus o Bad Bunny. Este hecho, además de inédito es relevante, ya que es el primer cantante de música regional mexicana en presentarse en uno de los programas estadounidenses más populares “The Tonight Show”, conducido por Jimmy Fallon, algo que ningún otro intérprete mexicano de este género había logrado.

Esto muestra un cambio en la industria musical que merece una especial reflexión. Por un lado, tiene una implicación positiva, ya que representa un posicionamiento cultural el hecho de que una canción mexicana sea la más escuchada a nivel mundial, y que un artista local se vuelva famoso sin el apoyo de una casa disquera importante y prácticamente sin una inversión para los videos; a diferencia de otros ejemplos de éxitos como el Gangnam Style de la industria coreana, pero que contó con el apoyo de la disquera más importante del país.

Por otro lado, si uno escucha las demás canciones de Peso Pluma todas están ligadas con el narco, como CH y la Pizza, El Belicón, o Siempre Pendientes, en la que habla del Chapo Guzmán; lo que también le ha valido críticas sobre la idealización y romantización del narco a través de los corridos tumbados o belicosos, que narran las “hazañas” de narcotraficantes y hacen apología de la violencia que se vive en las calles.

La pregunta de fondo es ¿qué hace tan popular a este personaje y sus canciones? ¿será que reflejan las aspiraciones de éxito, lujo y riqueza, que se desean obtener fácilmente aún a costa de la violencia? Los corridos tumbados reflejan cierta realidad de algunas regiones de México, pero ¿no valdría la pena ser reconocidos a nivel mundial por otras canciones del norteño, la banda, el mariachi o el bolero? Alguna vez lo fuimos por Cielito lindo, México Lindo y Querido, o Bésame Mucho. Quizás es momento de replantear las tendencias de la industria musical. Al final, la música debería servir para la liberación y expresión del espíritu humano, no para su enajenación.

 @LuisH_Fernandez