Rechaza AMLO que plantas de Iberdrola sean chatarra, son rentables, asegura

11, abril 2023

PATRICIA RAMIREZ

Foto: Cuartoscuro

El presidente Andrés Manuel López Obrador defendió de nueva cuenta la adquisición de 13 plantas de energía de la empresa española Iberdrola y aseguró que no son chatarra, además de que consideró que es una inversión rentable, que se recuperará en un plazo de 10 años.

Durante su conferencia de prensa, el presidente calculó que para 2024 la Comisión Federal de Electricidad podría llegar a 65 por ciento del total, mientras que en el caso de Petróleos Mexicanos va hacia la autosuficiencia en combustibles.

“Lo que hacían era privatizar ganancias y socializar perdidas”, dijo tras asegurar que no es un fondo privado sino la banca de desarrollo la que financiará esta operación.

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Asimismo, precisó que por esta operación Iberdrola deberá pagar 700 millones de dólares en impuestos, que irán directamente a la hacienda pública.

Añadió que la reforma energética que se concretó en el gobierno de Enrique Peña Nieto se decía que teníamos un tesoro debajo del mar y se necesitaban recursos para extraerlos, pero impulsó la idea de que eran necesarios diversos cambios a la norma legal para poder extraer los hidrocarburos que había en aguas profundas, los cuales fueron clasificados como un tesoro nacional que no podía ser explotado, pero en realidad iban sobre lo que estaba en tierra.

Y de todo lo que prometieron no se logró casi nada, pues solamente hay tres contratos activos, no se bajaron los precios de las gasolinas y el diésel y producen apenas como 40 mil barriles de petróleo, en lugar de los 3 millones que prometieron.

En este sentido, recordó que Iberdrola inició sus operaciones en el gobierno del expresidente Ernesto Zedillo y creció en el gobierno de Carlos Salinas de Gortari e incluso Claudio X González fue asesor de Zedillo. “Fue en estos sexenios, donde se originaron las plantas que comprará su administración”, precisó.

Sin embargo, acotó que la intención de las administraciones pasadas fue que las instalaciones que operaba la Comisión Federal de Electricidad quedaran en desuso para que no hubiera participación del Estado en el sector y se entregara la producción de energía a los productores privados.