Jake Rogers tenía 21 años y era una promesa de la Universidad de Tulane cuando los Houston Astros lo eligieron en el Draft de 2016 de Grandes Ligas pero un año más tarde, fue enviado a los Detroit Tigers como parte del acuerdo para adquirir a Justin Verlander. Y ahora, ocho años más tarde, se encargó de derrotar en el primer juego de la Serie de Comodines de la Liga Americana en pleno Minute Maid Park a esa misma novena que le dio su primera oportunidad ligamayorista.

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Junto a Rogers, Tarik Skubal, quien obtuvo la triple corona de picheo en la campaña regular y es favorito a conquistar el premio Cy Young en el nuevo circuito, lanzó una joya de pitcheo con solo cuatro hits permitidos, un pasaporte y seis chocolates en seis rollos completos, para comandar esta importante victoria felina al mejor de tres juegos.

Se trató de un triunfo por pizarra de 3-1, el primero de la novena de la Motor City luego de una década de ausencia en la postemporada de MLB. Y tras el largo ayuno, la victoria supo a gloria para los de Michigan.

Jake Rogers remolcó la primera carrera del juego en el segundo inning, al enviar al quisqueyano Wenceel Pére ,a la registradora. Tras romper la castaña, Trey Sweeney produjo la anotación de Parker Meadows y Matt Vierling mandó al plato al propio Rogers con un sencillo con el que fue suficiente para redondear el daño a los locales.

Fue hasta el noveno rollo, que tras un batazo de dos bases de Yordan Álvarez y un sencillo de Alex Bregman, Yainer Díaz conectó un imparable al bosque derecho para pintar la única rayita de los Astros.

Se trató del el cruce entre el tercer y sexto sembrado de la Americana, por lo que los Tigers no eran en lo absoluto favoritos en los casinos. Aún así, pudieron dar la campanada y ponerse 1-0 en la serie.