AIDA RAMÍREZ

Foto: Cortesía IMEF

México tiene una excelente regulación bancaria, por lo que no se observa alguna situación anómala con las instituciones financieras; no obstante, se debe estar atentos ante posibles choques en el entorno global ante las elecciones en Estados Unidos y los próximos comicios en México que de suyo, ya tienen un pronóstico reservado, alertó el Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF).

Sin embargo, advirtió que la incertidumbre que ha provocado la quiebra de bancos en Estados Unidos (Silicon Valley Bank y Signature Bank) y de Credit Suisse en Europa, desencadenó episodios de volatilidad en los mercados que podrían impactar a las instituciones financieras no bancarias en México.

En ese sentido, el presidente del organismo de especialistas, José Domingo Figueroa, comentó que si bien la Fed, el Departamento del Tesoro y la Corporación Federal de Seguro de Depósitos (FDIC) estadounidenses tomaron acciones para calmar la tensión, “tal parece que los problemas en el sistema financiero global apenas comienzan a aparecer y habrá que estar prevenidos para la volatilidad que se avizora en el panorama”.

Destacó que los bancos en México están bien capitalizados incluso sobre los requerimientos regulatorios -con alrededor de 19 por ciento, cuando el mínimo regulatorio es de 10.5 por ciento-; pero las instituciones financieras no bancarias podrían sufrir los estragos de estos episodios en un entorno “en el que las tasas de interés van al alza y el crédito comienza a apretarse”.

En ese sentido, cabe recordar que entre estas instituciones se encuentran casas de bolsa; arrendadoras; aseguradoras; afianzadoras; cajas de ahorro y préstamo; fideicomisos de fomento y, empresas de factoraje.

Al respecto, Mario Correa, presidente del Comité Nacional de Estudios Económicos del IMEF, comentó que no se tiene alguna institución en la mira de que pudiera verse afectada; “lo que sí es previsible y de alguna forma lo vemos con la quiebra de Silicon Valley Bank, son aquellas instituciones cuyo modelo de negocio dependa del financiamiento barato y abundante para ser viable”, sostuvo, pues éste está siendo cada vez más caro.

Correa consideró que, ante este panorama de subida de tasas de interés e incertidumbre, los bancos serán más cuidadosos de sus recursos, lo que implica que para estas instituciones financieras no bancarias y empresas que reciben el financiamiento “puedan verse más susceptibles a este tipo de riesgos porque cerrarán ‘la llave del dinero”.

Por lo anterior, el IMEF consideró que tanto el Banco de México (Banxico) como la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), “tienen que estar pendientes de este tipo de instituciones, si tienen la resiliencia adecuada, que no tengan bonos de largo plazo con un riesgo de tasa de interés fondeando o cubriendo depósitos de corto plazo”.

Por otro lado, el IMEF revisó sus previsiones de crecimiento de la economía desde 1.2 por ciento que consideró en febrero pasado, a 1.4 por ciento que se considera en el tercer mes de esta anualidad.

Sin embargo, se estima que la inflación aumentó de 5.2 a 5.3 por ciento al concluir este año, por lo que este indicador “sigue siendo una de las principales preocupaciones de la economía, porque se observa mayor resistencia, que si bien ha comenzado a descender en el índice general, en la parte subyacente sigue por arriba del 8.0 por ciento”.