Argentina repudia violencia y atropello al Congreso estadounidense

6, enero 2021

Buenos Aires, 6 ene (EFE).- El presidente argentino, Alberto Fernández, repudió “los graves hechos de violencia y el atropello al Congreso” de Estados Unidos, después de los episodios de tensión que se registraron durante la jornada en Washington D.C. por parte de seguidores del presidente estadounidense, Donald Trump.

“Confiamos en que habrá una transición pacífica que respete la voluntad popular”, indicó Fernández desde su cuenta en la red social Twitter, en la misma línea que otros dirigentes políticos latinoamericanos y mundiales.

Asimismo, al tiempo que rechazó los sucesos por los cuales grupos de personas entraron en el Capitolio, expresó su “más firme respaldo” al presidente electo, Joe Biden.

El asalto al Capitolio estadounidense se produjo cuando ambas cámaras celebraban una sesión para corroborar la victoria electoral de Biden en las elecciones de noviembre pasado.

Trump había instado a sus aliados a interferir en ese proceso y a su vicepresidente, Mike Pence, a arrogarse un poder que no le otorga la Constitución, y arengó a sus simpatizantes a que siguieran luchando durante un mitin por la mañana en Washington.

Miles de seguidores del presidente saliente se reunieron primero en el parque cercano a la Casa Blanca, para dirigirse después al Capitolio y entrar por la fuerza.

Biden estimó por su parte que la democracia del país “está bajo un asalto sin precedentes”, una “insurrección” que “roza la sedición, y debe acabar ahora”, después de la irrupción en el Congreso de cientos de seguidores de Trump.

Una mujer que asaltó las instalaciones del Capitolio falleció después de ser herida de bala durante los hechos, indicaron fuentes policiales al canal MSNBC.

Las autoridades de Washington D.C. decretaron un toque de queda a partir de las 18.00 (23.00 GMT) en la ciudad, poco después de que las autoridades consiguieran despejar el interior del Capitolio y lanzaran gases irritantes y de aturdimiento para dispersar a las cientos de personas aún congregadas en sus alrededores. EFE