REDACCIÓN OVACIONES
Foto: Reuters
La Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC), afiliada a la Organización Mundial de la Salud (OMS), ha declarado al aspartamo como un “potencial cancerígeno”. Sin embargo, se enfatiza que sigue siendo seguro para el consumo dentro de los niveles establecidos. Esta afirmación se basa en los resultados de dos paneles de expertos separados de la OMS, cuyo objetivo fue evaluar la evidencia de riesgo potencial y determinar el riesgo real asociado con esta sustancia.
El aspartamo es ampliamente utilizado como edulcorante en productos que van desde refrescos dietéticos hasta chicles. A pesar de las aparentes contradicciones en las declaraciones, el jefe de nutrición de la OMS, Francesco Branca, sugiere una tercera opción para los consumidores que deseen evitar el azúcar: optar por beber agua en su lugar.
La clasificación de la IARC como “potencial cancerígeno” se basa en evidencia limitada de que el aspartamo podría causar cáncer. Sin embargo, no se considera el nivel de consumo necesario para que una persona esté en riesgo, lo cual es evaluado por otro panel, el Comité Conjunto sobre Aditivos Alimentarios (JECFA) de la OMS y la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).
Tras una revisión exhaustiva, el JECFA concluyó que no hay pruebas convincentes de que el aspartamo cause daño y continúa recomendando mantener los niveles de consumo por debajo de 40 mg/kg al día. Esta guía se ha mantenido desde 1981 y es seguida por reguladores en todo el mundo.
Varios científicos no relacionados con las revisiones han señalado que la evidencia que vincula al aspartamo con el cáncer es débil. Asociaciones de la industria alimentaria han respaldado estas decisiones, destacando que el aspartamo es seguro y una opción adecuada para quienes buscan reducir el consumo de azúcar en sus dietas.
La OMS enfatiza que los niveles de consumo actuales no representan un riesgo para la mayoría de los consumidores. Sin embargo, Branca insta tanto a los fabricantes como a los consumidores a ejercer moderación en relación con el aspartamo. Aunque la OMS no busca eliminar completamente el aspartamo de los productos, se ha advertido sobre su uso excesivo.
En resumen, la clasificación del aspartamo como “potencial cancerígeno” por parte de una agencia vinculada a la OMS ha generado controversia. Aunque se ha encontrado evidencia limitada de su posible relación con el cáncer, la mayoría de los expertos y las asociaciones de la industria respaldan la seguridad del aspartamo cuando se consume dentro de los niveles establecidos. Es importante que los consumidores tomen decisiones informadas y moderen su consumo de edulcorantes.
