MARTÍN AVILÉS
Foto: Reuters
Max Verstappen activó el modo bestia y ante una pista de Zandvoort pintada de anaranjado por la afición entregada por su piloto, consiguió su tercer apele consecutiva en el Gran Premio de Países Bajos, mientras que el piloto mexicano Checo Pérez logró clasificar a la Q3, donde apenas y pudo conseguir el séptimo mejor tiempo. Ahora, el azteca deberá remar contracorriente el domingo, si es que quiere detener las incipientes criticas que siempre lo rodean.
Detrás de Verstappen, largarán en la grilla de salida de mañana, Lando Norris de McLaren, George Russell de Mercedes y el sorprendente Alex Albon, quien abordo de su Williams hizo milagros en el país de los tulipanes.
Ya desde la Q1, los estragos de la lluvia provocaron que Pérez Mendoza apenas sorteara la eliminación, al quedar en la posición 13. De pronto, los fantasmas del pasado reciente rondaron al mexicano, al tiempo que Alex Albon sorprendía al mundo al quedarse con el mejor tiempo hasta el momento.
Para la Q2, el jalisciense hizo los ajustes suficientes para exorcizar sus demonios conseguir el octavo mejor tiempo de la pista y así evitó el recorte de cinco pilotos. El británico Logan Sargeant dio la sorpresa al colarse por primera vez en su carrera a la Q3 en una muestra del buen momento de Williams en la clasificación de Zandvoort. Quien fue eliminado en esta instancia fue Lewis Hamilton, quien había dicho en la semana que se encontraba listo para pelear con Checo por el segundo lugar en el Campeonato Mundial de Pilotos, pero no pudo siquiera calificar a los mejores 10 de la qualy.
QUALIFYING CLASSIFICATION
Verstappen makes it a hat-trick of poles at his home race 💪
Superb effort from Alex Albon who finishes P4 👏#DutchGP #F1 pic.twitter.com/ofnrIGv4yJ
— Formula 1 (@F1) August 26, 2023
El sueño duró poco para Sargeant, quien se estrelló en un muro de contención, lo que provocó una bandera roja con ocho minutos y 13 segundos restantes en el crono. Ya tras la reanudación, a cuatro minutos y cinco segundos por terminarse la sesión, el monegasco Charles LeClerc perdió el control de su monoplaza y también chocó para provocar otra bandera roja en un accidentado inicio de la Q3.
Y así empezó el show de Vestaappen. El campeón del mundo dio una vuelta magistral ante su gente para levantar de su asiento a cada uno de los aficionados presentes. Pintadas de anaranjado las gradas, Max encontró la inspiración necesaria para demostrar por qué es el mejor piloto del momento.
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“Fue una clasificación difícil pero la pista estaba resbaladiza había que evita problemas, manejamos bien, pusimos neumáticos pisos seco y la última vuelta la disfruté mucho”, dijo el neerlandés al término de la sesión.
En contraste, para mala suerte de Pérez, George Russell y Albon cerraron con una gran vuelta y el mexicano quedó rezagado hasta la séptima posición. Checo no pudo encontrar su mejor versión debido a las interrupciones provocadas por los accidentes, y pagó caro, pues las críticas serán mordaces —como de costumbre— en las próximas horas.
