AIDA RAMÍREZ

Foto: Cuartoscuro

A filo de las 13:00 horas de este jueves, las cenizas de Antonio Monroy Jiménez, la persona de 59 años que murió por la golpiza a manos de empleados del restaurante bar “La Polar”, en la colonia San Rafael, fueron depositadas en el panteón Xahuento, en Tultepec, Estado de México.

Su hijo Antonio y familiares que lo acompañaron hasta su última morada, le llevaron banda y a ese ritmo lo despidieron.

Y es que señalaron que Monroy Jiménez era “alegre” y “fiestero”.

La noche del miércoles se le veló en una funeraria de la colonia San Rafael, se llevó a cabo una misa de cuerpo presente y la mañana de este jueves se incineraron sus restos, para luego ser llevados al municipio de Tultepec.

Asimismo, la Fiscalía capitalina detuvo a dos personas más, Oskar “N” y Braulio “N”, quienes durante la noche del miércoles fueron llevadas a sus instalaciones, por su probable participación en el asesinato de Antonio Monroy, la noche del pasado domingo.

Y es que se les encontró en el interior del restaurante-bar, cuando un agente del Ministerio Público de la Fiscalía de Investigación Territorial en Cuauhtémoc solicitó y obtuvo una orden de cateo para inspeccionar La Polar, a fin de ubicar indicios que pudieran estar relacionados con el ilícito.

Los imputados serán presentados ante un juez de control para determinar su situación legal.