AIDA RAMÍREZ
Foto: Cortesía Coparmex
En México hay más de 10 millones de personas que, a pesar de estar en edad de trabajar y tener potencial para hacerlo, no se encuentran ocupadas y no aportan su talento a la economía.
Lo anterior se desprende del estudio que sobre “El panorama de las vacantes y la población disponible en México”, llevaron a cabo la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) y el Instituto Mexicano de la Competitividad (IMCO), en donde también se indicó que este grupo incluye a dos millones de personas desocupadas, 2.6 millones de personas que no participan en la economía por encontrarse en un contexto que se los impide, y 5.8 millones de personas disponibles para trabajar pero que no participan en la economía por falta de incentivos.
Como parte del estudio, se efectuó una encuesta en el primer cuatrimestre de este año, en donde José Medina Mora, presidente nacional del sindicato patronal afirmó que las empresas enfrentan diversos retos entre ellas falta de personal y una alta rotación.
“Para el 87% de las empresas encuestadas, la dificultad para cubrir vacantes están entre los tres principales retos que tienen y para el 81% está la escasez de trabajo calificado, o sea, éstas son dos variables las que nos reportan las empresas socias de Coparmex que tienen su mayor dificultad.
LEE ADEMÁS: Casi 2 millones de pasajeros atendidos por la Red ASA de enero a junio de este año
Cuando lo vemos racionalmente vemos que si bien es cierto que el promedio es el 75% de las empresas consideran que su mayor reto es precisamente en materia laboral, el conseguir personal para cubrir las vacantes, o sea esta insuficiencia de personal”, dijo.
Y es que en algunos estados esa cifra incluso supera el 80 por ciento, como en Jalisco, Baja California Sur o Quintana Roo, por sectores ligados al turismo.
De su parte, Ana Bertha Gutiérrez, integrante del IMCO, señaló qué hay diversas barreras que enfrentan las empresas como el tema de las condiciones para que las mujeres participen en la economía, la educación o la necesidad de ampliar la oferta educativa y por ende, incentivarlos más y pensar que tengan más probabilidades de éxito en el mercado laboral.
“Y también otros temas, como la necesidad de salarios más altos o mejores condiciones laborales que eviten que estén renunciando dejando estos trabajos donde podrían solucionar por ejemplo el problema de la rotación”, señaló.
En tanto, Valeria Moy, directora del IMCO, observó que son alrededor de cuatro millones de mujeres que por una u otra razón no pueden trabajar.
“Lo que es impresionante es que hay cuatro millones de mujeres que podrían trabajar ahorita, frente a dos millones de hombres. A mí me parece evidente que si no tienes escuelas de tiempo completo, si la escuela a la que llevas a las criaturas cierra a las 12, si no tienes guarderías, si no tienes un sistema de cuidados es imposible que las mujeres se incorporen al mercado laboral”, señaló.
Para abatir esta problemática se requiere flexibilidad en el trabajo, apoyo de cuidados infantiles y el incremento de la cobertura educativa, dijo.
