AIDA RAMÍREZ
Foto: Cuarroscuro
La madrugada de este jueves, el gobierno de la Ciudad de México logró recuperar –sin incidentes- 127 metros cuadrados de espacio público, al retirar varias estructuras metálicas que se ubicaban ancladas debajo de la banqueta, pero que además, vendían bebidas alcohólicas, principalmente cervezas preparadas.
Dunia Ludlow, subsecretaria de Programas de Alcaldías y Reordenamiento de la Vía Pública del Gobierno de la Ciudad de México, dio a conocer en sus redes sociales, que el operativo derivó de denuncias ciudadanas en las que se especificaba que los establecimientos no estaban cumpliendo con los lineamientos de operación.
Por lo que al desmantelarlos, se recuperaron 127 metros cuadrados de espacio público, dijo.
Y es que, entrada la noche del miércoles y durante las primeras horas de este jueves, personal de la Dirección General de Servicios Urbanos y Sustentabilidad, del Gobierno de la Ciudad de México, así como decenas de elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, así como soldadores del gobierno capitalino llegaron hasta la zona de Tepito, sobre el Eje 1 norte, para retirar puestos semifijos que operaban como “chelerías”, pero también en Avenida del Taller y en la calle Héroe de Granaditas.
Las autoridades aseguraron que el operativo se llevó a cabo ante diversas denuncias anónimas, en las que se quejaban de la venta indiscriminada de alcohol en la vía pública, no obstante que los comerciantes se habían comprometido el pasado 12 de enero a retirar voluntariamente este tipo de comercios.
Dunia Ludlow, junto con Martí Batres Guadarrama, secretario de Gobierno, se reunieron con representantes de la organización Comercio Popular, con el cual se acordó retirar 38 establecimientos que operaban como chelerías callejeras, a fin de reordenar el espacio público en la zona y reducir la inseguridad, sin que ello se hubiera llevado a cabo.
Este tipo de operativo no sólo se ha llevado a cabo en la alcaldía Cuauhtémoc, sino también en Coyoacán, Iztacalco, Iztapalapa, Miguel Hidalgo y Venustiano Carranza, donde -en conjunto con el Instituto de Verificación Administrativa (Invea)- se han revisado y desmantelado establecimientos que comercian bebidas alcohólicas y generan ruido.
