PATRICIA RAMÍREZ

Foto: Cuartoscuro

Ante la presión ciudadana, finalmente los coordinadores parlamentarios en la Cámara de Diputados destrabaron la minuta relativa al aumento en el periodo vacacional a los trabajadores mexicanos, que será votado este martes en comisiones, pero se le harán cambios, por lo que deberá regresar al Senado, donde apenas tendrá unos días para ser procesado, antes de que concluya el periodo ordinario de sesiones.

El dictamen de la Comisión del Trabajo y Previsión Social, que ya fue circulado entre los legisladores, establece que de los 12 días que tendrán los trabajadores en el primer año de trabajo seis serán de forma continúa y los otros seis a acordar entre el patrón y el trabajador.

La modificación al artículo 78 de la Ley Federal del Trabajo establece que “Las personas trabajadoras deberán disfrutar por lo menos de seis días de vacaciones en forma continua, del total del periodo que corresponde conforme a lo previsto en el artículo 76 de esta ley.

En todo caso, las personas trabajadoras tendrán la potestad y el derecho de pactar con el patrón la forma y tiempos en el que disfrutarán los días de vacaciones que tengan a su favor, ya sea de forma continua o parcial”.

Sin embargo, en un artículo transitorio se establece que el decreto una vez aprobado, entrará en vigor el 1 de enero o un día después de ser publicado, en caso de que esto sea el próximo año, lo que abre la puerta a que no sea aprobada de inmediato.

El presidente de la Comisión del Trabajo, el morenista Manuel Baldenebro Arredondo, convocó a la sesión de comisión a las 9:30 de la mañana de este martes para votar el dictamen y se prevé que habrá una petición para le sean dispensados todos los trámites y pase de inmediato al pleno para su discusión.

De acuerdo con la argumentación del proyecto, los diputados consideraron que un periodo continuo de 12 días podría afectar a los asalariados, en razón de que limita las posibilidades de que los empleadores y los trabajadores acuerden diferir estos días para que se distribuyan como mejor les convenga a ambas partes, y se utilicen de manera libre acorde a sus necesidades, responsabilidades, situación económica, entre otros.

Insiste en que con esto también se pretende garantizar y otorgar certeza a los trabajadores del disfrute de sus vacaciones conforme a sus necesidades personales y familiares, lo que sin duda coadyuvará a una mejor integración familiar y productividad laboral.

No obstante, también reconoce que el aumento a los periodos vacacionales afectará sobre todo a las pequeñas y medianas empresas, que deberán suplir al personal en descanso, y a eso se suma que hay actividades que no pueden ser suplidas por el grado de especialidad en el trabajo.

“Por lo que para el beneficio de ambas partes se estima que debe existir la posibilidad de llegar a acuerdos entre patrones y trabajadores para dispersar a través del año laboral el periodo de vacaciones con un mínimo de seis días continuos”, refrenda.

Sin embargo, este cambio implica que la minuta tendrá que ser regresada al Senado de la República y con ello los tiempos se acortan, pues el periodo extraordinario concluye el próximo 15 de diciembre.