Andrés Manuel López Obrador continúa con su discurso que polariza, que provoca repulsa hacia los medios de comunicación y hacia los periodistas.

Su influencia es tal, que basta echar una vuelta por twitter y facebook para confirmar cómo existe una división social entre simpatizantes y opositores del tabasqueño.

Su derecho de réplica es indudable, pero no su derecho a atacar, a exponer y hasta a enjuiciar y sentenciar no sólo a los periodistas, sino a nadie.

Ayer fue asesinado el quinto periodista en lo que va de 2022.

Heber López Vásquez fue baleado en su estudio de grabación en Salina Cruz, Oaxaca. El fiscal Arturo Peimbert Calvo informó que hay dos detenidos.

-¿Hasta cuándo se va a terminar este discurso que invita a agredir, a violentar y a acabar con los periodistas?, se escuchó en radiopasillo.

No afloja

El que continúa en su labor para conseguir lo que parece imposible es Ricardo Monreal Ávila.

El coordinador de los senadores de Movimiento Regeneración Nacional (Morena) va y viene, recibe invitados y más, en busca de convencer, de cabildear para que se apruebe la reforma eléctrica.

Ayer lo hizo con representantes del Consejo de la Industria de Productos de Consumo, a quienes explicó los alcances de la reforma.

-Se ve cuesta arriba, porque al ser una reforma constitucional se requieren dos terceras partes de los senadores, lo que Morena no tiene, ser escuchó en radiopasillo.

Que pausa no es ruptura

Como ha hecho otras ocasiones, Andrés Manuel López Obrador matizó ayer su declaración del miércoles, sobre la pausa con España.

-Nosotros somos muy respetuosos del pueblo español. Tenemos relaciones íntimas con el gobierno español.

– No hablé de ruptura. Es sólo una pausa, una protesta respetuosa, fraterna, por los abusos y agravios de sus empresas.

Y reiteró que Iberdrola, OHL, Repsol y BBVA son algunas de esas firmas.

Insistió:

– Deberían ofrecer hasta disculpas.

¿No lo han hecho?

¡No importa!

En tanto, José Manuel Albares, ministro del exterior español, informó que habló por teléfono con Marcelo Ebrard para pedir una explicación.

Pero deslizó:

-El gobierno de España rechaza tajantemente las injustificadas declaraciones del presidente de México sobre las empresas españolas.

Esa palabra de pausa no lleva a ningún tipo de rompimiento de relaciones, dijo ayer el ministro.

Y hasta hubo comunicado oficial.

-¿Hacia dónde va la política exterior de México, con frentes abiertos con Panamá por el caso Salmerón y nuevamente con España?, se escuchó en radiopasillo.

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