POR AIDA RAMÍREZ

Precisamente a la mitad del año, los analistas del sector privado encuestados por el Banco de México (Banxico), elevaron apenas a 1.77 por ciento la previsión de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) mexicano para 2022, desde 1.76 por ciento señalado en la encuesta de mayo anterior; pero también aumentaron a 7.45 por ciento su proyección de inflación al término de esta anualidad, desde el 6.88 por ciento establecido un mes anterior.

Asimismo, en contraste, para 2023, los expertos estiman que la economía crezca alrededor de 1.74 por ciento, que se ubica en una cifra menor que el 1.94 por ciento que se consideró un mes antes.

Cabe recordar que la tasa de inflación mexicana cerró en 2021 en 7.36 por ciento, su mayor nivel en dos décadas y más del doble de la meta de 3.0 por ciento más/menos un punto porcentual del instituto central.

En este sentido, las proyecciones de 37 grupos de análisis nacionales y extranjeros recibidas entre el 20 y el 29 de junio destacaron como factores que podrían obstaculizar el crecimiento económico del país en los próximos seis meses destacaron son los relacionados a la gobernanza y la inflación; y a nivel particular, son la inseguridad pública, las presiones inflacionarias, el aumento en precios de insumos y materias primas, la incertidumbre sobre la situación económica interna y la incertidumbre política interna.

Sobre el tipo de cambio, los analistas consideran que el peso cierre en este año en 20.73 unidades por dólar, mientras que en la encuesta anterior la proyección era de 20.92 pesos por cada billete verde.

Para 2022, las expectativas sobre la balanza comercial se revisaron a la baja al pasar de un déficit de 13 mil 680 millones de dólares a otro de 14 mil 344 millones de dólares.

Mientras que el pronóstico de inversión extranjera directa (IED) para 2022 se incrementó al pasar de un estimado de 30 mil 538 millones de dólares a una mayor de 31 mil 224 millones de dólares, mientras que para 2023 su estimación fue de 30 mil 886 millones de dólares.