Fallece el firmante de la paz y analista político salvadoreño Roberto Cañas

24, enero 2021

San Salvador, 24 ene (EFE).- El analista político salvadoreño Roberto Cañas, uno de los firmantes de los Acuerdos de Paz de 1992 que pusieron fin a doce años de guerra civil, falleció este domingo a sus 70 años, según han informado medios locales.

El periódico Diario Co Latino y la radio YSKL señalaron que Cañas, quien también fue miembro de la guerrilla, murió la tarde de este domingo a consecuencia de un problema estomacal, de acuerdo con fuentes cercanas a la familia.

Recordaron que el analista político se desempeñaba como catedrático de materias sociales en la privada Universidad Francisco Gavidia y que anteriormente impartió clases en las universidades Centroamericana (UCA), Tecnológica de El Salvador (UTEC) y en la estatal Universidad de El Salvador (UES).

Apuntaron que el economista de profesión fue parte de la Fuerzas Armadas de la Resistencia Nacional (FARN), una de las organizaciones que componían la entonces guerrilla. Además, fue miembro de la Comisión Política y del Consejo Nacional del ahora partido de oposición Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN, de izquierda).

Entre 1989 y 1992 participó como vocero y delegado de la comisión de negociaciones que culminaron en los Acuerdos de Paz el 16 de enero de 1992, apuntaron.

Por su parte, La Prensa Gráfica indicó que Cañas estudió en la Universidad de El Salvador, obtuvo un máster en Administración de la Educación de la Universidad Latina de Costa Rica, con especialización en Investigación Educativa y en el Harvard Institute For International Development logró un postgrado en Formación de Investigadores Educativos.

Recientemente se cumplieron 29 años de la firma de dichos acuerdos, aniversario que no fue celebrado por el Gobierno de Nayib Bukele.

Gobierno anteriores realizaban actos oficiales para conmemorar la fecha, en los que eran invitados los firmantes de los acuerdos, entre estos Cañas.

Los Acuerdos de Paz de 1992, firmado en México, pusieron fin a doce años de un conflicto interno que dejó más empobrecido a la nación centroamericana, 75.000 muertos y 8.000 desaparecidos. EFE