Humanos pueden infectar a sus mascotas con Covi19 y generar nuevas variantes, advierten especialistas de la UNAM

11, febrero 2022

POR PATRICIA RAMÍREZ

Aunque no existe evidencia científica que afirme que los animales transmiten el SARS-CoV-2 a los humanos es un hecho que cuando una mascota se infecta es porque su dueño está contagiado, por lo que es necesario monitorearlas, para evitar que surjan nuevas variantes, advirtieron especialistas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Erika Hernández Villegas, académica del Laboratorio de Virología de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia (FMVZ) de la UNAM, explicó que cuando hablamos de coronavirus en general nos referimos a toda una familia de virus y puede afectar a diferentes especies. A los seres humanos, en específico, les perjudica el SARS-CoV-2, pero también se ha visto que puede llegar a afectar a animales porque son susceptibles a la enfermedad.
“Cuando se sabe que una mascota, por ejemplo, está infectada por SARS-CoV-2 es porque su dueño está contagiado; aunque en algunos zoológicos les realizan pruebas PCR de rutina a los animales para descartar la enfermedad”, indicó Hernández Villegas.
Recordó que la decisión de sacrificar a los infectados, como ocurrió en Hong Kong donde dos mil hámsteres, conejos, chinchillas y cobayas fueron sometidos a pruebas y a la eutanasia, luego de que un trabajador y once roedores de una tienda de mascotas dieron positivo al nuevo coronavirus, no es nada fácil, pero se hace de manera preventiva.
Estas medidas, apuntó, se llevaron a cabo en los casos de influenza aviar y porcina, con el fin de contener los virus y evitar que infecten a los individuos.
Subrayó que experimentalmente se han desarrollado vacunas para el uso de emergencia en perros y gatos, las cuales han demostrado ser eficaces. Sin embargo, hasta ahora no está justificado su uso, ya que no existe evidencia de transmisión a los humanos.
La pandemia, aseveró, trajo como reflexión que los seres humanos no son los únicos que viven en este planeta y que también es necesario tomar medidas que eviten la invasión de ecosistemas.
Los primeros reportes indican que perros y gatos fueron las primeras mascotas afectadas por SARS-CoV-2. Recientemente en Staten Island, Estados Unidos, un estudio reveló que ciervos cola blanca estaban infectados con la variante ómicron, la cual fue transmitida de un humano a un animal y posteriormente entre animales, y no al contrario.
En el caso de Dinamarca, a finales de 2020 autoridades de esta nación tomaron la decisión de sacrificar 15 millones de visones de una granja productora de pieles, de manera preventiva para evitar futuros brotes y “saltos” a las personas.