JOSÉ ANDRÉS DÍAZ

Foto: Mexsport

Tal parece que solo fue un breve idilio entre el portero mexicano Guillermo Ochoa y el Salernitana.

El furor de sus primeras actuaciones a su llegada a la Serie A de Italia, ya quedaron atrás porque de nueva cuenta se quedó en la banca, ahora ante la Lazio.

Esta semana, el equipo granate le volvió a dar las gracias al entrenador Davide Nicola, a quien ya había cesado en semanas previas.

El otrora estratega, sentó al veterano arquero mexicano ante el Hellas Verona, y le dio paso al italiano Luigi Sepe, quien tras regresar de una lesión, el timonel optó por darle minutos ya que dijo “tiene una jerarquía en el equipo”.

Pues la derrota ante el Verona y la salida de Nicola, dieron lugar a que Salernitana nombrara al portugués Paulo Sosa en el banquillo; con ello, se esperaba que Memo Ochoa volviera a la titularidad.

Sin embargo, eso no sucedió y el cinco veces mundialista con México se quedó en el banquillo por segundo juego consecutivo, ya que Sousa puso en su once al arquero Sepe, con lo cual mandó un claro mensaje sobre quién piensa es el guardameta titular.

El Salernitana, que terminó con diez hombres por la expulsión de Dylan Bronn, perdió en casa 0-2 ante la Lazio con doblete del goleador Ciro Immobile y se quedó en la posición 16 de la tabla general de la Serie A, a cuatro puntos de zona de descenso.

Y Memo Ochoa tendrá que remar contracorriente si quiere volver a tener minutos y que su aventura en Italia no haya sido solo un fugaz romance de invierno.