No se usará maíz genéticamente modificado en masa y tortilla

13, febrero 2023

AIDA RAMÍREZ/Reuters

Foto: Cuartoscuro

México ordenó revocar permisos y no conceder nuevas autorizaciones de liberación al ambiente de semillas de maíz genéticamente modificado así como para la alimentación humana, esto es, en los productos masa y tortilla.

Lo anterior, según el decreto publicado la tarde de este lunes y que entra en vigor este martes, que se da en medio de una disputa con Estados Unidos sobre el comercio de maíz transgénico, empero el gobierno mexicano asegura que con este nuevo decreto, “México reitera su compromiso de cumplir el T-MEC, según el cual las decisiones fitosanitarias deben estar basadas en evidencia científica”.

El documento, que sustituye a uno precio de finales del 2020, que causó controversia, establece también negar nuevos y anular autorizaciones existentes de permisos para la importación, producción, distribución y uso del herbicida glifosato.

En este mismo tenor, la Secretaría de Economía expuso que el objetivo de este nuevo Decreto es precisar el objetivo y alcance de las políticas públicas, así como “eliminar cualquier posible imprecisión del texto predecesor, el cual se prestó a interpretaciones diversas”, por lo que “con esta nueva versión se brinda claridad en sus objetivos y certeza regulatoria con base en evidencia técnico-científica”.

La dependencia señaló que las precisiones más importantes en el decreto son que se acota estrictamente al maíz, por lo que la canola, la soya, el algodón y el resto de las materias primas no quedan sujetas a esta regulación.

Explica que para evitar confusiones, se establece una categorización del maíz según su uso: “alimentación humana (masa y tortilla), forraje e industrializado para alimentación humana”.

Asimismo, señala que el Decreto prohíbe el uso de maíz genéticamente modificado para la masa y la tortilla.

“Lo anterior, no representa afectación alguna al comercio ni a las importaciones, entre otras razones, porque México es de sobra autosuficiente en la producción de maíz blanco libre de transgénicos.

De lo que se trata es de consolidar tal soberanía y seguridad alimentaria en un insumo central en la cultura de las y los mexicanos”, sostiene Economía.

En cuanto al uso de maíz genéticamente modificado para el forraje y la industria, observa que se elimina la fecha límite para prohibir su uso, quedando sujeto a que exista suficiencia en el abasto.

Y por ello, la dependencia anunció que se instalarán mesas de trabajo con el sector privado nacional e internacional para lograr una transición ordenada.

Se estableció explícitamente que Cofepris realizará investigaciones científicas en torno a los posibles impactos en la salud de las personas del maíz genéticamente modificado. Tales estudios se llevarán a cabo con agencias sanitarias de otros países.

El gobierno mexicano señaló que nuestro país es centro de origen de más de 55 razas de maíz, y que la actual política de seguridad alimentaria consiste en preservar este patrimonio biocultural.

Y de igual forma, se promueve la preservación de las prácticas agroecológicas de nuestras comunidades campesinas, la milpa y la riqueza gastronómica.