No sirve.
El informe que Alejandro Encinas Rodríguez hizo sobre el caso Ayotzinapa tampoco es la verdad histórica.
El diario The New York Times entrevistó al responsable del caso y una declaración del subsecretario de Gobernación fue clave para tirar su verdad.
“Hay un porcentaje importante, muy importante, que está todo invalidado”, dijo el funcionario, Alejandro Encinas, publicó el medio neoyorquino.
Se refiere a los pantallazos de presuntos mensajes entre los malandros, donde se describe cómo y qué se hizo con los estudiantes.
Y ayer, en la mañanera de Palacio, Andrés Manuel López Obrador otra vez usó la estrategia de hacerse la víctima, acusar a los medios conservadores y neoliberales de orquestar una campaña en contra de su gobierno y de sus funcionarios.
Y reiteró lo que ha dicho por años:
Que el caso Ayotzinapa se esclarecerá y que no lo heredará a la siguiente administración.
Encinas Rodríguez recibió el espaldarazo presidencial.
– Le tenemos toda la confianza a este señor, no es que lo van a desgastar o a debilitar. Él nos representa. No está solo. Puede venir otro reportaje del Wall Street, Financial Times o Washignton Post, dijo López Obrador.
¡Y cómo no!
Si hasta su hijo, Alejandro Encinas Nájera, ya tiene trabajo en la Secretaría de Economía, donde renunció Tatiana Clouthier, y se encargará de las negociaciones o pláticas en las quejas que Estados Unidos y Canadá han presentado por los abusos en temas energérticos del Tratado Comercial con México, llamado T-MEC.
Los padres de familia de los 43 normalistas, que confiaron en este gobierno, fueron defraudados. Encinas Rodríguez hasta viajó a Israel a buscar a Tomás Zerón, el funcionario del gobierno de Enrique Peña Nieto al que acusan de los montajes.
Lo bateó.
Jesús  Murillo Karam, ex titular de la Procuraduría General de la República (PGR), está en el hospital en calidad de detenido, acusado de dsaparición forzada y tortura, cuando, después de lo sabido. su verdad histórica se fortalece.
Y los militares presos, acusados de haber participado, saldrán beneficiados.
Este trato desaseado de la investigación, por las prisas de López Obrador para presentar algo en el octavo aniversario de la desaparición -26 de septiembre pasado- derivó en el bodrio.

EJÉRCITO, HASTA 2028

Era un strike cantado.
Ayer se alcanzaron los 17 congresos estatales necesarios por ser una
reforma constitucional para que el Ejército se quede en las calles hasta 2028.
Así lo mandata la Carta Magna y así debió ser.
Movimiento Regeneración Nacional (Morena) gobierna en 21 estados, por lo que conseguir los votos no fue muy difícil. Ahí anduvo Adán Augusto López Hernández, el secretario de Gobernación, cabildeando, presionando a la oposición.
Mucho menos con el apoyo del Partido Revolucionario Institucional (PRI), que en las Cámaras de Diputados y de Senadores fue con Morena por la reforma y le completó las dos terceras partes de los legisladores presentes.

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