GENARO ALTAMIRANO

Foto: Cortesía

Con los féretros de los tres muertos que dejó el ataque que sufrieron por pobladores de El Cacahuatal, habitantes de Nuevo Yucatán realizaron una protesta en el Palacio Municipal de San Lucas Ojitlán, en el estado de Oaxaca.

En un mitin realizado ayer al mediodía, familiares y vecinos de las víctimas exigieron justicia al presidente municipal, extraído de Morena, Isidro Ortega Silva, así como el encarcelamiento de los demás responsables.

Ya se informó que a las 12:00 horas del pasado sábado la gente de Nuevo Yucatán sufrió el ataque de quienes viven en El Cacahuatal, con quienes se disputan un predio con cosecha de maíz.

El saldo fue de tres personas muertas y seis lesionadas. Como victimarios fueron señalados seguidores del juez municipal y comisionado agrario Antonio Cardano, quien fue responsabilizado por la misma Secretaría de Gobierno.

Este lunes antes de llevar a sepultar a los fallecidos en el panteón de su comunidad, pobladores de Nuevo Yucatán realizaron una marcha cargando los ataúdes, que colocaron frente al Palacio Municipal para exigir justicia.

Asimismo, demandaron la liberación del único detenido en los hechos, a quien señalaron inocente porque es de Yucatán y no cayó ninguna víctima del otro bando.

Asimismo, los dolientes y vecinos señalaron que previo al ataque, la autoridad comunitaria de El Cacahuatal “cortó” los servicios de energía eléctrica y agua entubada a un grupo de vecinos en los límites con el ejido Nuevo Yucatán, lo que consideraron una provocación.

“¡Nos vemos en las próximas elecciones para presidente municipal!”, gritaron algunos de los presentes en el ayuntamiento morenista, antes de partir a sepultar a las víctimas.