RICARDO MONREAL
Después de los daños causados por el huracán Otis, en términos de infraestructura social, urbana y turística, el Gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador presentó, el 1 de noviembre pasado, el Plan General de Reconstrucción y Apoyo a la Población Afectada en Acapulco y Coyuca de Benítez.
El planteamiento consta de diversos puntos que buscan auxiliar a la población, así como reconstruir ambos territorios. Entre las acciones incluidas están las siguientes:
- Apoyar con todo lo necesario a familiares de quienes perdieron la vida por el ciclón e intensificar la búsqueda de personas desaparecidas.
- Adelantar dos meses del pago de todos los programas de bienestar (Pensión Universal para Personas Adultas Mayores, Pensión para el Bienestar de las Personas con Discapacidad Permanente, y Apoyo para el Bienestar de Pescadores y Acuicultores, entre otros).
- Incorporar a 10 mil personas al programa Jóvenes Construyendo el Futuro, para apoyar en labores de limpieza, construcción, pintura y otras actividades.
- Otorgar seis meses de prórroga en el pago de Infonavit, Fovissste y Seguro Social.
- Exentar de pago del servicio de energía eléctrica de noviembre de 2023 a febrero de 2024.
- Entregar una canasta básica semanal de 24 productos alimenticios a 250 mil familias durante tres meses.
- Entregar un paquete de enseres domésticos a todas las familias damnificadas (cama, estufa, refrigerador, ventilador y vajilla).
- El Gobierno federal destinará del presupuesto público de este año 10 mil millones de pesos para el abastecimiento y mejoramiento de las líneas de distribución de agua, drenaje, arreglo de calles, alumbrado público, hospitales, escuelas, los dos aeropuertos y otros servicios.
- Exentar del pago de impuestos (IVA, ISR y otros) en Acapulco y Coyuca de Benítez desde octubre de este año hasta febrero de 2024.
No se puede soslayar que en los momentos de crisis y desastres naturales, como el que acaba de acontecer en Guerrero, quienes padecen mayormente son las personas más vulnerables. El plan puesto en marcha por el Gobierno federal para la población afectada en los municipios mencionados busca, asimismo, reducir la brecha de desigualdad que afecta a la población sistemáticamente marginada durante años, en particular durante el periodo neoliberal.
Por otra parte, en estos momentos se observa un pueblo que confía en sus instituciones, porque son ellas quienes ahora, de manera coordinada, brindan lo mejor de sí para que Acapulco y Coyuca de Benítez sean reconstruidos a la brevedad.
Entre tanto, el presidente López Obrador reconoció a personal y directiva de la Comisión Federal de Electricidad por su eficaz labor —sin precedente en el mundo— ante la emergencia. En una semana, señaló, prácticamente lograron restituir todo el servicio de energía eléctrica en Acapulco, después de que Otis arrasó con 10 mil postes de luz.
De igual manera, el mandatario destacó el trabajo de los 19 mil elementos del Ejército, de la Armada de México y la Guardia Nacional, que desde el comienzo de la tragedia han estado trabajando y sido responsables de aplicar el Plan DN-III-E, el Plan Marina y el Plan GN-A, además de llevar a cabo labores de limpieza, levantamiento de árboles, abasto de despensas y agua, atención médica, traslado de personas enfermas, y seguridad pública.
Es importante reconocer a los Gobiernos de otras latitudes que ofrecieron su ayuda y apoyo a nuestra nación, como Estados Unidos, Cuba, Honduras, Chile, Canadá, la Unión Europea y Argentina. El pueblo de México siempre agradecerá la solidaridad internacional en momentos de crisis.
El impacto del huracán Otis conmocionó y sensibilizó en muchos aspectos a nuestro país. Sin embargo, la respuesta institucional y social ha sido solidaria, oportuna y eficaz. Sin duda, el reto de la reconstrucción es grande, pero es mayor la voluntad de volver a estar de pie una vez más.
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