PATRICIA RAMÍREZ
Foto: Laura Lovera
La reforma al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), que acota las facultades del organismo electoral, implica meter el Plan B por otra vía, pues mutilaría los avances que se han alcanzado hasta el momento, aseguró el coordinador de los diputados de Movimiento Ciudadano, Jorge Álvarez Maynez.
“Se va a aprobar este asalto, este golpe letal al Tribunal Electoral, que lo va a terminar convirtiendo en un tribunal de chocolate; va a pasar de ser un tribunal constitucional a un tribunal meramente simbólico”, puntualizó.
Subrayó que las reservas presentadas por la diputada Aleida Alavez Ruiz, de Morena, y el diputado Marco Antonio Mendoza Bustamante, del PRI, al anteproyecto de dictamen son reformas cosméticas, reformas que no van al fondo del tema.
“Todo lo que no se permitió que sucediera con el Plan B en materia electoral, se permitirá con este dictamen como debilitar al árbitro electoral, generar impunidad, estado de indefensión para los ciudadanos, para la militancia, para las minorías, para quienes han sufrido históricamente la exclusión”, sentenció.
El líder parlamentario explicó que hasta ahora hay tantas gobernadoras en los estados, una paridad en la Cámara de Diputados, porque el TEPJF ha actuado, y esa no es una labor que se ha hecho a contentillo de los partidos políticos, y creo que debilitar al Tribunal es debilitar la capacidad de incidencia, los medios de impugnación.
“Sobre todo esa sentencia que dictara el Tribunal, ya no sería inatacable como en el principio de definitividad, podría recurrirse a la SCJN (Suprema Corte de Justicia de la Nación) y entonces se le quitaría esa facultad sustantiva al TEPJF”, subrayó.
Álvarez Máynez comentó que se está impugnando que Mario Delgado ya cumplió su plazo como dirigente nacional de Morena, así como Alejandro Moreno como dirigente nacional del PRI; si un hombre o una mujer “impugnaran ese tema no podrían hacerlo si les suspendieran los derechos políticos de forma arbitraria a alguna persona por no someterse a la disciplina partidista del dirigente”.
