El gobierno de la Ciudad de México anunció el retiro de la icónica Palma que se ubicaba en una de las glorietas de Reforma debido a las afectaciones ocasionadas por una plaga de hongos, por lo que convocó a despedirla el próximo domingo.

El ejemplar ubicado en el cruce de Río Rhin y Niza, se suma a la serie de palmeras que se retiraron por el gobierno capitalino, aunque la secretaria de Medio Ambiente de la CDMX, Marina Robles García aseguró que ya se llevan a cabo trabajos para el saneamiento de las plantas que han sido atacadas por plagas.

La Palma de esta glorieta, es un ejemplar que tiene aproximadamente 100 años y que se colocó en ese sitio a principios del siglo XX.

Al respecto, la jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum, informó que la palmera de Reforma se retirará el próximo domingo por la tarde-noche, con un emotivo homenaje y a partir del lunes iniciará una consulta ciudadana para decidir cuál será la especie que la suplirá, si una jacaranda, ahuehuete, ceiba, fresno o grevillea, así como el nuevo nombre para la glorieta.

“Tiene que hacerse en la noche, porque tiene que haber distinta maquinaria; la vamos a llevar a Vivero Neza, se tiene que hacer un tratamiento; y después –porque no es cualquier árbol de nuestra ciudad–, hemos pedido a un grupo de jóvenes artistas que puedan intervenirla y que pueda quedar colocada en algún sitio”, comentó.

En este tenor, Carlos Fredy Ortiz García, coordinador del Doctorado en Ciencias Agrícolas Tropicales, Colegio de Postgraduados (COLPOS) Campus Tabasco, sostuvo que ante la declinación de la palma canaria del Paseo de la Reforma, “es necesario su retiro considerando la magnitud del fuste y el desconocimiento del daño físico que tiene la fronda; y, dada la magnitud de la palma, es necesario retirarla del Paseo para asegurar el bienestar de la ciudadanía”.

Explicó que todas las palmas del mundo tienen problemas de plaga y enfermedades de diferentes orígenes y se puede observar que hay enfermedades causadas por microorganismos, y en algunos casos transmitidos por insectos, como el caso de los fitoplasmas, pero también existen enfermedades producidas por hongos que tienen la capacidad de bloquear el transporte hídrico, reducir la capacidad fotosintética de la planta y que van a favorecer el colapso de estas palmas.

Robles García aseguró que en un censo hecho en el 2018, se contabilizaron alrededor de 15 mil palmeras en calles y avenidas de la Ciudad de México, y de ese número, en la actualidad un 25 por ciento tiene algún tipo de plaga, y son justamente sobre estas palmeras plagadas que estamos trabajando.