Rompe en llanto El Conejo durante juicio de García Luna

1, febrero 2023

EFE

Foto: Reuters

NUEVA YORK.- El narcotraficante colombiano Harold Mauricio Poveda Ortega, alias El Conejo, que trabajaba en México para el cartel de Sinaloa, rompió a llorar durante una sesión del juicio contra el exsecretario de Seguridad Pública Genaro García Luna al ver unas imágenes de su antigua mansión.

Preguntado por la Fiscalía, El Conejo, vestido con traje oscuro y camisa, habló con entereza de asesinatos que ordenó, de secuestros e incluso relató con detalles cómo fue torturado y humillado por agentes de la Policía Federal. Sin embargo, se derrumbó cuando proyectaron en una pantalla de la sala imágenes de su casa en México y sus animales salvajes.

 

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Es mi casa. Era mi casa“, dijo el narco con la voz rota y mientras se limpiaba las lágrimas con una mano.

Las imágenes mostraban a sus tigres, sus leones y un mono, cuyos nombres El Conejo iba enumerando según aparecían y que guardaba en su casa, a la que los medios se refirieron en su momento y él recordó como “la mansión de la fantasía“: “Una casa que hice a mi gusto, a mi imaginación, una casa muy bonita”, dijo.

La casa está situada en Ciudad de México, en una zona conocida como “El desierto de los leones“.

 

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El Conejo, que está en libertad condicional en Estados Unidos en espera de que se dicte sentencia, es un testigo de la Fiscalía contra García Luna, acusado por narcotráfico.

En su testimonio aseguró que trabajaba para Arturo Beltrán Leyva, cabecilla del clan de los Hermanos Beltrán Leyva, y que formó parte del clan del Sinaloa hasta una guerra interna que estalló en 2008.

Salpican a medios mexicanos

Los medios de comunicación se han visto salpicados en el juicio por narcotráfico contra el exsecretario de Seguridad Pública Genaro García Luna, en relación con la detención, en enero de 2008, del capo de la droga Jesús Reynaldo Zambada, alias El Rey.

El narcotraficante colombiano Harold Mauricio Poveda Ortega, alias El Conejo, que trabajaba en México para el cartel de Sinaloa, aseguró que Arturo Beltrán Leyva, líder del cartel de los Hermanos Beltran Leyva, le pidió el día de la captura de El Rey que le enviara “de manera urgente” 300.000 dólares para que los medios de comunicación difundieran rápido la noticia.

Según el relato de El Conejo, que proveía a Beltrán Leyva con cocaína procedente de Colombia, El Rey había sido detenido en un operativo formado por agentes de policía junto con sicarios del clan de los Beltrán Leyva y después fue entregado a la Policía Federal.

Los narcotraficantes temían que la Policía Federal lo pusiera en libertad o negociara su liberación.

Arturo Beltrán me llama y me dice que, por favor, le haga llegar 300.000 dólares urgentemente para hacer llegar rápido el dinero a los medios de comunicación, para que empezaran a anunciar en los medios” la detención, dijo El Conejo, que actualmente se encuentra en libertad condicional en Estados Unidos en espera de su sentencia por narcotráfico.

Preguntado por la Fiscalía por la razón de pagar a los medios, El Conejo precisó que si salía en los medios la noticia “se hacía popular en México y también ya la DEA (la agencia antidrogas estadounidense) se daba cuenta de que (El Rey Zambada) está detenido y no podían soltarlo o llegar a algún arreglo”.

Ayer, el narcocontable Israel Ávila aseguró ante el jurado que el narco para el que trabajaba en enero de 2008, Mario Pineda Villa, quien era socio de Arturo Beltrán, le pidió, después de la captura de El Rey, que se pusiera en contacto con un periodista que supuestamente trabajaba para el cartel.

Según Ávila, cuando El Rey Zambada ya estaba bajo custodia, los policías estaban diciendo por radio “que querían cambiarlo, que el gobierno quería cambiarlo para no presentarlo (ante las autoridades judiciales)”.

Mario Pineda Villa me pidió que hablara con un periodista que trabajaba para el cartel para que hiciera saber a otros periodistas lo que estaba pasando. Se lo dije a este periodista”, contó ayer Ávila antes de explicar que de esta manera lograron ejercer “mucha presión sobre el Gobierno” para que siguiera detenido.

Sin embargo, ni ayer ni hoy fueron mencionados el nombre de los periodistas o de los medios supuestamente sobornados por los carteles, y tampoco la Fiscalía incidió en ese detalle.

El relato de hoy y la trascendencia de las detenciones se enmarcan dentro de un conflicto interno en el cartel del Sinaloa, y que acabaría derivando en una guerra abierta entre las facciones de Joaquín “El Chapo” Guzmán e Ismael “El Mayo” Zamabada, por un lado, y el clan de los Beltrán Leyva por el otro lado.

Conejo, que hoy calificó su relación con Arturo Beltrán como la de un padre y su hijo, dijo que la captura de El Rey fue organizada por Arturo Beltrán en represalia por un intento de detenerlo a él por parte de la Policía Federal, pero que según él había sido ordenada por El Chapo y El Mayo Zambada (Hermano de El Rey Zambada).

La Fiscalía intenta demostrar que entre 2001 y 2012 Genaro García Luna recibió sobornos millonarios del cartel de Sinaloa a cambio de información y protección.

Por su parte, los abogados del exsecretario de Seguridad Pública han armado su defensa hasta el momento con el argumento de que no hay pruebas físicas contra su cliente y de que los testimonios de los narcotraficantes no son creíbles porque son delincuentes y si han testificado ha sido con el fin de lograr una reducción de sus sentencias.