POR PATRICIA RAMÍREZ
La jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum Pardo, dio a conocer que se hará público el último reporte de la empresa DNV sobre el colapso en la Línea 12 del Metro, para que la ciudadanía conozca todas las observaciones que se hicieron a este peritaje, al que, advirtió se le dio un sesgo político y no técnico, por lo que no se le pagó este trabajo y se inició una demanda civil y se analiza la vía penal.
Tras señalar que al haber sido ya hecho público por un medio de comunicación, se analiza qué datos se deben ocultar por ley para hacer una versión pública, de manera que los ciudadanos puedan conocerlo a detalle.
Asimismo, la mandataria capitalina se dijo tranquila respecto al trabajo de su administración en ese caso y recordó que los dos reportes anteriores de la empresa noruega señalaban claramente que había errores de diseño en la construcción, que no sería posible detectar solo con las labores de mantenimiento.
“Estamos tranquilos y seguros de lo que hicimos. Ponen al mismo nivel las fallas en el diseño, en la construcción, en la certificación y problemas de inspección en el mantenimiento. Ninguna inspección en el mantenimiento podría haber detectado una falla en el diseño”, señaló al ser cuestionada sobre este tema.
Asimismo, precisó que todas las bitácoras de mantenimiento del Metro que se han realizado en su administración están disponibles a través del sistema de datos abiertos e insistió en que hubo un manejo político del último reporte.
En este sentido, precisó que un día antes de que la empresa DNV emitiera un boletín de prensa, lo que no había hecho antes, la senadora Xóchitl Gálvez adelantó algunas conclusiones y posteriormente hubo una ola de bots para magnificar estas acusaciones, a lo que se suma que los únicos que defendieron al abogado ligado a Mexicanos contra la Corrupción que participó en esa parte del dictamen fue esa misma organización.
Sheinbaum Pardo explicó que, ante el cúmulo de irregularidades, desde finales del año pasado, su administración rescindió el contrato con DNV, por lo que no se pagó ese último tramo, pues ni siquiera se apegaron a la metodología que ellos mismos propusieron.
A su vez, el secretario de Gobierno, Martí Batres, explicó que este último reporte es más confuso que efectivo, pues incluye temas inconexos, como la inspección, con lo cual además faltó a la verdad porque ha habido inspecciones sistemáticas, además de que una revisión externa no puede llevar al conocimiento de la causa estructural.
Finalmente, el secretario de Movilidad, Andrés Lajous, quien ha fungido como vocero en este tema, expuso que el segundo dictamen concluye que hubo un problema en la construcción, hay falta de pernos y un problema en la soldadura de los pernos que se colocaron y eso derivó en el colapso de hace un año y en el último reporte querían cambiar eso.
“Esas causas son las que tuvieron que ser relevantes para lo que ellos llaman el reporte tres, el análisis de barreras. Que en términos de la metodología que el gobierno compró, a través de un contrato, y que se llama: técnica de análisis sistemática de causas basado en barreras y que es marca registrada de la empresa. Se tuvo que haber iniciado el análisis a partir de las causas inmediatas que ellos mismo determinaron en su dictamen final”, acotó.
