POR AIDA RAMÍREZ

La inflación está decidida a continuar al alza, ya que en la primera quincena de junio de este año, el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC)  aumentó 0.49 por ciento respecto a la quincena anterior; por lo que la inflación general anual se ubicó en 7.88 por ciento, el nivel más alto desde la primera quincena de enero de 2001.

De acuerdo con la información publicada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI); ello fue como resultado de que los productos y servicios que registraron aumento de precios y que tuvieron mayor incidencia fueron la electricidad, la papa y otros tubérculos: pollo, refrescos envasados, naranja, servicios en loncherías, fondas, torterías y taquerías, restaurantes y similares, vivienda propia, transporte aéreo y pan dulce.

La inflación no fue más alta ya que lo anterior estuvo parcialmente contrarrestado por precios más bajos en el gas doméstico LP, limón, chile serrano, cebolla, uva, chile poblano, tomate verde, computadoras, huevo y en el limón.

Según el informe del Instituto, al interior del INPC, el índice de precios subyacente incrementó 0.50 por ciento a tasa quincenal y anual 7.47 por ciento.

Cabe señalar que esta tasa anual es la más alta desde la segunda quincena de diciembre de 2000 y suma 20 quincenas en continuo ascenso.

Al interior del índice subyacente, a tasa quincenal, los precios de las mercancías aumentaron 0.64 por ciento y los de servicios, 0.33 por ciento.

En el mismo periodo, se señala que el índice de precios no subyacente subió 0.49 por ciento quincenal y 9.13 por ciento tasa anual.

Dentro del índice no subyacente, a tasa quincenal, los precios de los productos agropecuarios crecieron 0.85 por ciento y los de energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno, 0.19 por ciento.