El presidente Andrés Manuel López Obrador presentó ayer un reporte sobre las inundaciones en Tabasco, Chipas y Veracruz donde hubo al menos 27 muertos y 200 mil afectados, pero dijo: por fortuna llegó la calma, se detuvo la lluvia y el pronóstico para los próximos días es sol y nulas precipitaciones pluviales, aunque hay 35 mil viviendas inundadas.
En conferencia de prensa comentó que el pasado sábado tuvo que suspender su gira de trabajo por Nayarit y Sinaloa debido a que estaba a punto de desbordarse la Presa Pequitas, pues lloví en tres días lo que llueve en todo un estado.
El presidente indicó que se hizo esfuerzo por evitar mayores daños y se desfogo la Presa con información puntual a la población, pero aun con ello hubo afectaciones.
Sobre el tema, la titular de Protección Civil, Laura Velázquez, comentó que llovió 2 mil 830 metros cúbicos de agua por segundo.
Esto representa 41 por ciento más que el promedio y 18 por ciento más que la media nacional.
Reportó que, en Tabasco, se reportan cinco muertos, 148 mil afectados y 35 mil 900 viviendas afectadas.
De los 17 municipios 13 están inundados y con afectaciones severas. Se establecieron 236 refugios.
En Chipas, se contabilizan 22 personas fallecidas y 16 municipios con severas afectaciones.
En Veracruz no hay fallecidos, cinco personas rescatadas, 15 municipios con daños, 109 colonias afectadas, 20 mil 149 personas afectadas, 5 mil 079 viviendas con penetración de agua, dos puentes afectados, 15 cortes carreteros, 14 deslizamientos, 16 árboles caídos y 17 corrientes desbordadas.
En los tres estados se implementó el Plan DN-III, el Plan Marina y acciones por parte de la Guardia Nacional, CNPC, SRECFE, Pemex, Medio Ambiente, Conagua, Sedatu y Bienestar.